Bueno pues ya esta aqu? la fecha tan esperada por todos los palomeros, me refiero a la apertura de la caza de la paloma torcaz, tanto al paso como en puesto fijo auxiliado por cimbeles, que entre otras cosas es la modalidad que un servidor practica con exclusividad.
Tengo que reconocer que colocado al paso en un collado de la sierra, o en un medio alto de la dehesa tirando torcaces, es toda una gozada, sobre todo lo primero, pero al menos para mi donde se ponga la caza de la paloma torcaz con cimbeles no tiene comparaci?n, pero como se suele decir para gustos colores.
L?gicamente en principio mi intenci?n en esa comentada apertura palomera era salir bien temprano para estar listo en mi puesto antes de las nueve de la ma?ana con todo colocado, hab?a preparado todo el d?a antes, excepto las escopetas, algo de comida, y los cimbeles estaba todo bien colocado en el interior de mi coche.
El domingo estaba invitado a cazar con mi amigo y compa?ero Jose Luis en su finca de Salamanca, por lo que en principio el? plan era cazar en Torrejon el s?bado, y desde all?, y sobre las cinco de la tarde irme directamente a Salamanca para cazar al d?a siguiente los dos juntos.
Pero unas cosas son los planes, y otra cosa son los impedimentos que pueden surgir para desbaratar? dichos planes. El impedimento al que me refiero es que las previsiones meteorol?gicas pronosticaban bastante agua en Torrejon, y pr?cticamente en toda Extremadura para el s?bado, por lo que ya me entraron las dudas, si ir, si no ir, si irme a media ma?ana, o irme a trabajar e irme a las dos de la tarde cuando saliera de trabajar directamente a Salamanca.
Eran tantas las dudas que tenia, que el viernes sobre las diez de la noche decid? que lo dejar?a todo preparado, y me levantar?a a las 5,30 para ver si llov?a mucho, o por el contrario no. Y as? lo hice, dej? todo listo para salir a las seis de la ma?ana para buscar mis cimbeles al campo, y sobre las doce me met? en la cama
A las cinco y media me levant? y cuando me asom? a la ventana comprob? que llov?a bastante por lo que al? final decid? que me volver?a a meter e la cama.
Sobre las siete volv? a levantarme y me prepar? para? en principio ir a buscar los cimbeles antes de entrar a trabajar, y despu?s de desayunar me fui a la tienda a intentar levantar Espa?a, ya estaba decidido que trabajar?a hasta las dos y cuando acabara me marchar?a hacia Salamanca.
Pero a medio d?a dej? de llover y comenz? a salir el sol, grandes claros se abrieron en el cielo y me entr? el gusanillo de pisar campo. Dicho y hecho, sobre las doce y media llam? a mi mujer y vino a relevarme a la tienda, r?pidamente? me puse en camino y a la una treinta ya estaba en la finca. La tarde estaba clara pero a lo lejos se ve?a que en cualquier momento pod?a caer la mundial, y as? fue, a pesar de no verse muchas palomas decid? aguantar all? un rato, mas que nada por ver si ya hab?a palomas en la zona o no, y pas? lo que tenia que pasar, que se puso a llover y tuve que resguardarme debajo de una encina para no calarme.
Ya no me pod?a mover, pues el coche lo tenia a unos trescientos metros y me hubiera mojado , aguant?, y cuando pas? el chaparr?n me fui hasta el coche, me cambi? de calzado y me encamin? direcci?n Salamanca.
Un poco antes de las cinco de la tarde llegu? al hotel, dej?? el bolso de viaje y me fui a la finca, cuando llegu? ya estaba all? Jose Luis esper?ndome, despu?s de los oportunos abrazos di de comer a las palomas mientras Jose Luis se ocupaba del ganado,una vez acab?? nos fuimos los dos al hotel, y una vez all? y despu?s de tomar una cerveza nos sentamos a cenar. La cena fue muy amena, charlamos de varios temas actuales y otros no tanto, pero sobre todo de los planes? para el d?a siguiente. En principio yo me pondr?a en el regato, y Jose Luis se colocar?a en la parte alta de la finca, estaba claro que el regato era mejor que donde se pondr?a el, pero se empe?o que as? fuera pues quer?a que yo me beneficiara de ello y me divirtiera.
Sobre las diez y cuarto dimos por concluida la cena y nos despedimos hasta el d?a siguiente, quedando all? en la finca a las seis treinta de la ma?ana.
A las cinco treinta me levant? , me di una ducha, y despu?s de vestirme baj? a por el coche y me fui direcci?n? a la finca, dos kil?metros mas adelante comenz? un densa niebla que me hizo ir muy despacio, incluso llegar a no encontrar la entrada al camino de la finca. Una vez en la casa de Jose Luis, desayunamos y despu?s de comentar la mala suerte que hab?amos tenido con el amanecer del d?a, Jose Luis me llev?? hasta mi puesto porque entre otras cosas posiblemente y debido a la niebla no hubiera dado con la entrada del camino , a pesar de haber estado all? varias veces, pero la niebla era muy densa y posiblemente hubiera dudado. A el le sobraba tiempo pues desde que? fabric? el remolque puesto no tarda pr?cticamente nada en montar el equipo cimbelero.
Al llegar al puesto y despu?s de desearle buena suerte a mi compa?ero, comenc? a montarlo todo ayudado por la linterna frontal de cabeza. Primeramente mont? el puesto, y a continuaci?n coloqu? dos p?rtigas con dos verticales, y la vara Portuguesa en el puesto, lo ultimo que hice fue ponerle las caperuzas a los ciegos y llevar el coche a unos doscientos metros para colocarlo debajo de una gran encina.
Comenz?? a amanecer y la niebla no levantaba, de vez en cuando se cruzaba alguna paloma por los alrededores del puesto pero mis escopetas aun segu?an guardadas en su funda doble. Tuvieron que pasar mas de dos horas para que poco a poco la niebla se fuera disipando, pero aun as? el d?a estaba triste, y se ve?an en el cielo mas nubes que claros.
Creo que la primera torcaz que cobr? fue a las diez y media, y seguidamente algunas mas, y sobre la una treinta de la tarde se pararon en seco, momento que aprovechamos para comer.
Para empezar tomamos unas anchoas que nos hab?a preparado mi mujer deliciosas, un par de secretos Ib?ricos en la parrilla, y unos filetes de pavo,? unos trozos de semi torta del casar y alguna que otra cosilla, todo ello regado con un buen vino de pitarra.
Una vez con el estomago lleno Jose Luis volvi? a su puesto y yo me qued? esperando a que las torcaces volvieran a moverse. Por la tarde lo hicieron menos que por la ma?ana, pero aun tir? alguna que otra torcaz, dando por concluido la jornada cimbelera? sobre las cinco de la tarde. Una vez recogido todo el equipo me march? para la casa y ya estaba all? Jose Luis? devolviendo las palomas a su palomar y sacando todo el equipo del coche. El tambi?n hab?a tirado algunas torcaces, y despu?s de hacernos la obligatoria fotograf?a de la jornada, nos despedimos con un fuerte abrazo y me march? al hotel para descansar, darme una buena ducha, y cenar algo antes de acostarme.
Estaba bastante cansado, por lo que decid? quedarme a dormir en Salamanca y salir para Caceres a las seis de la ma?ana, al menos saldr?a descansado y preparado para trabajar.
Bueno pues ya hab?amos inaugurado la temporada? palomera 2017, yo hab?a disfrutado de a jornada a tope, tuve muy buenos lances, y alg?n que otro fallo, pero al final conseguimos cobrar entre los dos 25 torcaces que hacen que seguramente pase toda la semana acord?ndome de las fren?ticas entradas de estas a los cimbeles, la pena fue la niebla que nos estropeo la ma?ana, si no hubiera habido niebla seguramente hubi?ramos doblado la percha, pero no podemos quejarnos, como yo suelo decir, yo firmar?a por que todas mis salidas en esta temporada fueran como esta.
Pas? una jornada muy bonita junto a mi compa?ero y buen amigo Jose Luis, esperando que no sea la ultima, que si Dios as? lo quiere ser?n algunas mas.