Jornada Mixta, caza y Trabajo

Mientras esperamos a que se abra la temporada de caza de Palomas Torcaces con cimbeles, que realmente es la que mas nos gusta, hay que tener entretenido al cuerpo, por lo que este pasado domingo decidimos que ir?amos a dar una vuelta con los perros para intentar abatir alguna que otra liebre, o perdiz, aunque tampoco solemos hacerle ascos a patos y codornices.

El d?a antes,? y despu?s de salir de trabajar a las dos de la tarde, me acerqu? a la finca a llevar las sillas, altillos, cadenas y garrafas de agua a los diferentes puestos que tengo en la misma, y comento esto por que me sorprendi? que al llegar a la finca hab?a un palomeo muy bonito, la verdad es que no me lo esperaba, pero sal? de la finca en cuesti?n muy contento . Eran las primeras torcaces que nos visitaban este a?o, y entre otras cosas me llam? la atenci?n de que estaban muy tranquilas, hacia tiempo que no las ve?a tan tranquilas como estaban estas.

El domingo en cuesti?n quedamos para desayunar los tres a las siete de la ma?ana, Andres, Jose, y yo en la churreria de la Mejostilla,? y a continuaci?n marchamos hasta la finca, media hora mas tarde est?bamos entrando en el camino de la finca y comenzamos a ver las primeras torcaces, mis compa?eros se alegraron de ello, e incluso paramos los coches para ver sus bonitos vuelos, eran las primeras torcaces de la temporada, y daba gusto el verlas.

Una vez que nos organizamos comenzamos a cazar al salto, caza lo que se dice caza vimos poca pero tres horas mas tarde paramos para comer un pincho y dejar a los perros que descansaran. La segunda vuelta fue mas corta, y despu?s de tirar alguna liebre y unos patos decidimos que hacia mucho calor y que volver?amos a los coches. Una vez all? y despu?s de descansar un rato nos animamos y nos acercamos a los diferentes puestos que tenemos en el acotado y los preparamos para el fin de semana que viene que es cuando comienza la temporada de palomas.

Mientras uno cortaba mamones de las encinas el otro acarreaba con ellos, y yo los iba colocando sobre la le?a seca del a?o pasado de dichos puestos, y despu?s de limpiarlos interiormente? les d?bamos varias vueltas con cuerdas de sujetar las alpacas de paja para que los mamones no se desprendieran del mismo. Primeramente lo hicimos con uno de los puestos, y a continuaci?n con otros dos mas, y la verdad es que quedaron? mas que bien, muy compactos muy mimetizados y con la altura justa, esperemos que las torcaces nos quieran este a?o y se dejen enga?ar por nuestros cimbeles, las esperaremos en el interior de dichos puestos.

L?gicamente una vez que terminamos la tarea, nos lavamos un poco y nos dispusimos a comer, primeramente nos tomamos una cerveza, y despu?s Jose nos hizo unos huevos fritos con torreznos de Soria que estaban para chuparse los dedos, no pod?a faltar un buen trozo de bizcocho, y un chupito de aguardiente gallega, un ratito de siesta, y despu?s de recoger todo nos marchamos para casa.

Hab?amos ido a dar unas vueltas tras las perdices y liebres y acabamos restaurando los puestos que destinamos para cazar las torcaces, la caza es as?, aunque una vez que acabamos dicha tarea los tres nos alegramos de haberlos hecho.

Cierto es que? este tipo de cosas que se hacen con ilusi?n, una vez que las acabas sientes una satisfacci?n personal que solo la pueden entender aquellos que saben de lo que estamos hablando, seguramente si nos hubieran pagado por ello no lo habr?amos hecho.

Juan Manuel Alonso Rabazo.-

Ultimas salidas de Media Veda 2017

ULTIMAS SALIDAS DE MEDIA VEDA 2017

 

Bueno, pues se acab? lo que se daba, por este a?o ya podemos limpiar y engrasar las armas, y recoger en nuestros trasteros los puestos y dem?s componentes de nuestro equipo ?tortolero.

Se daba la coincidencia que este a?o el d?a de Extremadura ca?a en viernes, por lo que en principio tendr?amos tres d?as por delante para salir al campo en busca de las tan deseadas tortolillas, y algunas torcaces autoctonas.

Eso en principio, por que ya metidos en faena era l?gico que no sali?ramos ma?ana y tarde durante los tres d?as, entre otras cosas es por que el que mas y el que menos tiene familia, y ademas la temporada de Media Veda de este a?o no se va a recordar por la abundancia de t?rtolas y torcaces en nuestros campos.

Yo personalmente sal? al campo el viernes por la ma?ana, el s?bado por la tarde y el domingo tambi?n por la ma?ana. Aprovech? para llevarme a mi nuevo perro e intentar educarlo a estar conmigo de quieto en el puesto y cobrar los p?jaros abatidos.

Me lo llev? el s?bado por la tarde, y a la primera torcaz que abat?, al cobrarla y llenarsele toda la boca de plumas, la trasladaba de un sitio para otro, y si se descuida me la pela del todo, pero poco a poco fue cogiendo afici?n, y al final de la tarde era todo un espect?culo ver cobrar, y llegar a las torcaces casi antes de haber ca?do al suelo, la pena es que aunque si que vi bastantes palomas no cobr? muchas, tampoco fueron pocas pero me hubiera gustado matar ?al perro una docena mas de p?jaros. Que afici?n cogi?, era digno verlo a mi lado sentado y mir?ndome a ver si me encaraba la escopeta, la verdad es que disfrut? como hacia tiempo, y por eso decid? que el domingo por la ma?ana repetir?a salida para ver si el perro se aficionaba del todo. Y as? fue. Tambi?n en esta ocasi?n ?le mat? unas palomas, y este se port? como un verdadero campe?n. Este a?o tengo intenci?n de llev?rmelo muchos d?as de caza al puesto, ya veremos como me apa?o para manejar perro y cimbeles a la vez, ya veremos, pero lo que est? claro es que lo voy a intentar, un perro de este tipo da mucha compa??a en el campo, y ya hacia a?os que no compart?a puesto y perros, debido a que en los ?ltimos a?os solo hab?a tenido podencos, y estos como todos sabemos suelen ser algo mas recios para mantenerlos quietos en posici?n de espera y cobro en el puesto.

El caso es que sal? tres ratos del (fin de semana puente), los dem?s ratos los dediqu? a seguir adiestrando a los pichones de este a?o a los cimbeles , y de paso a repintar los altillos que suelo utilizar para colocar en el interior de los puestos naturales y que me den mas altura que tengo en mis cotos, y tambi?n ?algunas p?rtigas de las que utilizo para el aprendizaje de dichos cimbeles, me gusta pintarlos todos los a?os, pues de tanto uso llegan a deteriorarse en algunos tramos.

Compart? la pintura con muchos toques de cuerda a los pichones durante toda la ma?ana, el caso es que el s?bado ma?ana los tuve colocados en lo alto de las encinas desde las siete de la ma?ana hasta las dos de la tarde en que los retir?, y despu?s de tomarme junto a mi mujer un aperitivo con una cerveza me duch? y com?, me acost? un ratito a siesta y despu?s me fui a buscar el perro y me fui al campo.

Respecto a la Media Veda de este a?o hay que rese?ar que ha sido flojita,pero es lo que hay, y espero que sigamos saliendo por muchos a?os mas , aunque solo sea por pasar un par de horas en nuestras dehesas contemplando esos bonitos amaneceres , o puestas de sol si es que lo hacemos por la tarde. Dios nos de salud para poder seguir haci?ndolo, ya solo hay que pensar que la apertura de la temporada de caza ya esta a un paso, y esperar que esta ?nos depare muchos momentos de satisfacci?n personal.

Ya hablaremos de eso,seguramente antes de lo que pod?is pensar, tener en cuenta ?que un mes pasa r?pidamente, y despu?s ya estaremos enfrascado en lo que mas nos gusta, CAZAR.

Tercera Salida de Media veda 2017

 

TERCERA SALIDA DE MEDIA VEDA 2017

 

En esta ocasi?n la segunda salida de Media Veda de esta temporada seria en Salamanca, mi buen amigo , y compa?ero de caza Jose Luis, me hab?a invitado a pasar ?el fin de semana ?cazando en la finca de su propiedad.

Seg?n el, no es que fuera para tirar cohetes pero se ve?an bastantes africanas, y tambi?n algunas torcaces entrar a comer ?en el rastrojo de trigo. Ni que decir tiene que a mi autom?ticamente, y como me suele ocurrir en estos casos se me pusieron los nervios nerviosos.

Lo primero que hice fue llamar al hotel donde suelo quedarme para reservar habitaci?n para el fin de semana. Tenia todo organizado para salir el viernes por la tarde al dejar de trabajar para dormir en Salamanca y quedar el s?bado sobre las seis treinta de la ma?ana con Jose Luis para desayunar en la finca, y a continuaci?n irnos al rastrojo, y en principio hacer la tirada de ma?ana.

Pero hay ocasiones en que por muchos planes que hagas surge un problema y te los tira todos por tierra, en este caso ?por un asunto personal tuve que desistir de salir el viernes por la tarde, y centrarme en poder hacerlo si acaso el s?bado a partir de las dos de la tarde, y poder cazar la tarde del s?bado, y el domingo.

Y as? lo hice,como?yo ya sabia ?el mi?rcoles por la tarde que no podr?a salir el viernes , me tranquilic? un poco y me prepar? para hacerlo el s?bado a medio d?a.

Para no olvidar nada en la salida, hice una nota en la cual apunt? todo lo que necesitar?a para ese fin de semana, y poco a poco fui metiendo en el coche el equipo para no dejar nada olvidado.

El s?bado a las seis treinta de la ma?ana me levant?, y despu?s de barrer la piscina fui colocando el resto del equipo en el coche, excepto la comida que llevar?a, y l?gicamente ?las palomas. Despu?s de ir con mi mujer a desayunar ?chocolate con churros a una churreria de Caceres nos fuimos a trabajar.Yo cur?ndome en salud ya hab?a dejado pr?cticamente todo preparado para ?salir para Salamanca lo antes posible.

Sobre las diez y media de la ma?ana llam? a Jose Luis para preguntarle que hab?a hecho, el me dijo que hab?a visto bastantes t?rtolas, y tambi?n algunos bandos de torcaces entrar al rastrojo, y que al final hab?a cobrado 14 africanas, y dos torcaces, me coment? que hab?a visto mas t?rtolas que torcaces, y que en la zona que yo me habr?a puesto si hubiera ido, hubiera cobrado al menos una docena de Palomas, me gust? mucho que se hubiera divertido, pero sent? el no haber podido estar all? con el desde por la ma?ana, pero bueno es lo que hab?a y no pod?a ser de otra manera. Qued? con el en que intentar?a estar a las cinco de la tarde en la finca para que me diera tiempo a montar y cazar por la tarde, le ped? que viera el sitio exacto donde me colocar?a, y que si le daba tiempo me hiciera las gu?as en las encinas donde colocar?a las p?rtigas y a los cimbeles, Jose Luis me dijo que contara con ello y nos despedimos hasta por la tarde. ?Estuve trabajando hasta las dos de la tarde, y ?quince minutos despu?s ya estaba metiendo las palomas en el jaulon de trasporte, ?la comida en el coche y ?dispuesto para salir. A las dos treinta horas tomaba la entrada de la autov?a hacia Salamanca y a las cuatro treinta entraba por la puerta de la finca.

All? en la puerta del porche me estaba esperando Jose Luis, junto a sus dos bonitas mujeres, la suya, y su preciosa hija.

Despu?s de los oportunos y tan esperados abrazos, besos y dem?s , nos despedimos de las dos y nos fuimos directamente al rastrojo. La tarde al contrario que la ma?ana seg?n Jose Luis era calurosa, pero aun as? yo al menos estaba impaciente por montar el puesto cimbelero.

Jose Luis lo tiene mucho mas f?cil, pues el a?o pasado ide? y fabric? un remolque puesto en el cual lleva todo el equipo, incluso los volantines en amplias jaulas, y que hab?a dejado all? a la sombra por la ma?ana. Una vez llegamos a dicho puesto remolque Jose Luis me indico donde me hab?a preparado las gu?as y donde me aconsej? que me colocara, y cinco minutos despu?s ya estaba abriendo y colocando el puesto. Una vez vestida con una malla de verano la estructura del puesto, cosa que tard? en hacer menos de un minuto, aprovech? las ramas que hab?a cortado Jose Luis para hacer las gu?as para pon?rselas alrededor del puesto y as? mimetizarlo un poco mas.

Viendo de donde venia el aire, e intentado estar a la sombra al menos un par de horas, coloque una p?rtiga con un ?vertical en el cual coloqu? a un pich?n del mes de Junio en lo alto, llev? la cuerda hasta el puesto y a consecuencia de que el aire no venia del todo como yo hubiera deseado coloqu? igualmente a su hermano en otro vertical y en una gran encina que me daba la sombra, este estar?a a medio aire, pero lo suficiente para que llamara la atenci?n a palomas que me llegaran de atr?s. Y para rematar la faena, coloqu? la vara Portuguesa en el poste trasero del puesto y sub? en ella a otro pich?n de hace tres meses, una vez que recog? el equipo sobrante y lo coloqu? en la sombra tom? un buen trago de agua y me sent? a esperar acontecimientos.

Yo pens? que al haber estado Jose Luis cazando en el rastrojo y no haber dejado comer a las palomas estas entrar?an antes, pero me equivoqu?, seguramente habr?an comido en otra zona del mismo, y de momento siendo las cinco cuarenta y cinco de la tarde solamente hab?a visto volar de largo una paloma torcaz.

Sobre las seis de la tarde vi venir a mi derecha una pareja de t?rtolas, me pareci? correcto el intentar reclamarlas con los cimbeles y as? lo hice, ?por que no iba a poder probar si se picar?an?

Y vamos si se se picaron, estas se vinieron rectas al cimbel que tenia delante del puesto dispuestas a posarse con el, pero no se lo permit?, me fui con la primera, y la quede seca, me fui con la otra y tambi?n tuve la fortuna de abatirla, hab?a empezado la tarde haciendo un bonito doblete de Africanas nacidas en extremadura, pues se trataba de una pareja de pichones.

A los diez minutos vi venir otra pero a esta no me dio tiempo a reclamarla, sencillamente me fui con ella y la abat?, esta tambi?n era un pich?n.

Las torcaces tardaron en hacer acto de presencia, tardaron al menos una hora mas para moverse por el rastrojo, pero una vez que lo hicieron estuvieron movi?ndose durante toda la tarde, en la cual me dio tiempo abatir ocho bonitas torcaces todas ellas picadas a los cimbeles.

Pr?cticamente fueron todos unos lances preciosos, me entraron a los cimbeles muy bien, y me hicieron disfrutar por dos cosas, la primera es por que los pichones se estaban portando muy bien, y segunda porque me sent? lleno al estar cazando en un rastrojo de trigo, nada de comedero, era un tradicional rastrojo de trigo puro y duro.

Mientras tanto Jose Luis tambi?n tiraba de vez en cuando, posiblemente mas que yo. ?Cuando comprend? que la cosa hab?a llegado a su fin baj? los cimbeles ?de sus posaderos y los met? en el jaulon para que comieran y bebieran.

Mientras tanto quit? el puesto de donde estaba y lo coloqu? en la parte contraria de la encina que me daba la sombra, pues tenia intenci?n de cazar al d?a siguiente en el mismo sitio, pero sabiendo que el viento vendr?a de diferente frente lo coloqu? mirando al sureste.

Cuando recog? lo que no deb?a dejar en el rastrojo y lo met? en el coche me cerqu? a ver a Jose Luis para interesarme por lo que hab?a hecho. Me coment? que hab?a cobrado cuatro t?rtolas y cinco torcaces, y que pod?a haber cobrado algunas mas pero que no pudo ser.

Al momento llegamos a la casa y colocamos las palomas y t?rtolas cobradas en un frigor?fico que Jose Luis tiene all? para estos menesteres, nos lavamos un poquito, y nos sentamos los tres a deleitar una maravillosa cena que nos hab?a preparado la mujer de mi amigo Jose Luis.

Durante la cena estuvimos charlando de diferentes temas muy amenos, y sobre las diez y media me desped? de ellos quedando para el d?a siguiente a las seis cuarenta y cinco en la casa para ponernos de nuevo en el rastrojo.

Una vez que llegu? al hotel, y despu?s de darme una ducha, baj? a la cafeter?a y me tom? un refresco de lim?n, pero mas que nada para pedir una botella de agua y sub?rmela a la habitaci?n por si las anchoas que hab?a tomado durante la ?cena les daba por hacer de las suyas.Sobre las doce de la noche me met? en la cama, y di por concluida la primera jornada de tarde en Salamanca.

A las cinco treinta de la ma?ana y antes de que sonara el despertador me levant?, y despu?s de pasar por la ducha y afeitarme me vest? ?recog? la ropa y la bolsa de viaje, mi almohada y las escopetas, y media hora mas tarde ya estaba en camino hacia la finca, fui muy despacio pues me sobraba tiempo, y ,media hora mas tarde estaba en la puerta del palomar de Jose Luis que es donde estaba este recogiendo los cimbeles.

De all? nos fuimos al rastrojo, y cuando llegamos al puesto remolque nos despedimos, Jose Luis se iba a cambiar a otra zona ?del mismo, y yo al mismo sitio de la tarde antes.

Unos minutos despu?s y con la linterna de cabeza encendida coloqu? los dos pichones en sus respectivas cimbeleras verticales, y al otro en la vara Portuguesa, unos minutos despu?s llev? al coche a la sombra de una gran encina como a unos trescientos metros ?y me volv? al puesto.

Yo estaba convencido de que la jornada en cuesti?n iba a ser de poco movimiento pues se les hab?a molestado por la ma?ana del s?bado, las molestamos tambi?n por la tarde, y lo mas normal es que estas estuvieran mosqueadas y optaran por buscarse otro rastrojo. Sin embargo esa era la ?esperanza que yo tenia, que las tiraran en los diferentes rastrojos de los alrededores y se movieran.

Al rato de amanecer vi pasar cerca de mi cinco t?rtolas a una velocidad incre?ble, al rato otras cuatro, y despu?s tres mas, pero ninguna paloma torcaz. No fue hasta pasada una hora desde que amaneciera cuando la primera torcaz cruz? a doscientos metros de mi puesto y que despu?s de haberla trabajado con los cimbeles se vino picada entrando en la plaza a huevo, no le di oportunidad y me qued? con ella, quince minutos despu?s otra torcaz que venia de la parte de donde estaba Jose Luis, entr? ciega a los cimbeles y de nuevo me qued? con ella. Estaba viendo algunas torcaces pero pasaban de largo para posiblemente posarse en la linde del rastrojo, pero en la otra finca.

Unos minutos despu?s a seis palomas que ven?an de mi izquierda consegu? meterlas a base de cimbeleo, pero con tan mala suerte que se pararon en una encina que hab?a a cien metros. Estuve unos minutos sin moverme para ver que ocurr?a, incluso mov? de nuevo a los cimbeles y lanc? dos ciegos al aire por ver si alguna se animaba a moverse, pero nada, no se mov?an de las copas de la encina. Fue por lo que decid? dar unas fuertes palmadas y esperar acontecimientos, y as? fue, estas se levantararon al ruido de las palmadas, pero r?pidamente comenc? de nuevo a trabajarlas y estas se picaron de nuevo y se vinieron rectas a los cimbeles, a la primera la par? en el aire veinte metros antes de llegar a mi, y al tiro las dem?s repiaron d?ndome la oportunidad de irme ?con otra que tambi?n ?qued? muerta en el aire. Un bonito doblete, pero hay que reconocer que ?mucho ?mas bonito fue el lance en cuesti?n.

La cosa segu?a muy parada, Jose Luis tiraba de vez en cuando pero la verdad que muy poco.Ya sobre las nueve treinta el cimbel que tenia a mi derecha vol? el solo y ?pens? que pod?a ser una rapaz por lo que cog? la escopeta, (solo para espantarla ) si se acercaba y me coloqu? debajo ?de la encina donde estaba el cimbel, le tir? dos veces seguidas de la cuerda para ver si estaba tranquilo y de pronto vi aparecer una torcaz que se pos? junto a el en lo mas alto de la encina. L?gicamente mi intenci?n fue aprovechar la ocasi?n y tirarla, pero pens? que ?la iba a destrozar por lo que baj? la escopeta, al momento me di cuenta de que le estaba viendo la cabeza, por lo que pens? en apuntarla a dicha cabeza y as? no la estropear?a, y as? lo hice, le apunt? a la cabeza , y la dispar?, esta salio volando con mas salud que tenia antes de posarse y se march?, no la toqu? ni un vago, y fue por que en mi obsesi?n por no destrozarla apunt? fuera de la cabeza esperando que alg?n vago le diera en ella, pero no pudo ser, y esta se march?, de lo cual mientras escribo estas lineas me alegro.

Viendo el panorama, recog? todo el equipo y al momento fui a por el coche y cargu? todo en el, de all? me fui en direcci?n a donde estaba Jose Luis, pero este ya me estaba esperando en el camino. Me hizo mucha gracia verle dentro del coche y con el «remolque puesto» enganchado, daba gusto verlo , daba gusto ver a sus volantines dentro de las jaulas que tiene incorporadas a dicho puesto, y que l?gicamente para estos es su palomar,Tambi?n vi que tenia incorporado un bebedero para las palomas soldado al carro . El carro puesto en cuesti?n es un punto, Jose Luis lo lleva todo dentro, p?rtigas , cimbeleras, rodillos, cartuchos, silla, en una palabra todo, todo, todo. Desde ?all? nos fuimos a la casa, pero antes Jose Luis solt? sus palomas en el palomar para que estas descansaran, comieran y bebieran. Una vez all? ?de nuevo nos ?estaban esperando en el jard?n la mujer de Jose Luis, y su bonita hija.

Ellos ten?an intenci?n de que me quedara a comer, de hecho hab?an sacado carne para hacer una barbacoa, pero despu?s de mucho pensarlo decid? que me marchar?a a casa, pues mi mujer se quedar?a sola a medio d?a, y no me parec?a bien dejarla sola, porque si me hubiera quedado, hubi?ramos cazado por la tarde y me habr?a quedado de nuevo en el hotel hasta las seis de la ma?ana del d?a siguiente que saldr?a hacia Caceres. Por eso pens? que lo mejor era marcharme y as? lo hice, una vez que metimos las palomas y las t?rtolas en la nevera que llevo para tal fin, me desped? de todos, y a las once treinta sal? direcci?n Caceres.

El fin de semana en Salamanca hab?a llegado a su fin, seg?n iba hacia casa estuve pensando en todo lo que hab?a vivido desde que sal? de Caceres el s?bado a las dos y media de la tarde, iba muy contento, no por que hubiera hecho una gran percha, ?eso es lo de menos, si no porque realmente hab?a disfrutado. Me gustan estas salidas de media veda para entre otras cosas probar ?los pichones del a?o, tanto de copa, como ciegos, y la verdad es que se hab?an portado como aut?nticos campeones, pero realmente iba contento, muy contento ,porque cada vez que voy a ver a mi amigo Jose Luis a su finca lo paso muy bien en todos los aspectos, he congeniado muy bien con el. y ya fuera de la afici?n que pueda tener al hablar de torcaces que ?por cierto es mucha, es por que lo considero un buen amigo, y me encanta estar a su lado, espero que sea por muchos a?os.

Ya solo queda un fin de semana de Media Veda, ya os contar? donde me dejare caer, si es que llego a salir, que espero que sea que si.

 

Apertura de la Media Veda 2017

APERTURA DE LA MEDIA VEDA 2017

 

PRIMERA SALIDA.?? 19 de Agosto, (s?bado)

 

Aun recuerdo con nostalgia las aperturas de Media Veda de hace treinta a?os m?s o menos, era todo un acontecimiento en nuestras vidas, por lo menos en la m?a. Con que ilusi?n se esperaba el tan se?alado d?a, no hab?a forma de poder dormir la noche antes, si es que no est?bamos en el campo para coger sitio.

Normalmente despu?s de tener visto un rastrojo ?de trigo el cual era visitado por? t?rtolas, y alguna que otra ?torcaz,? y que normalmente? sol?an ?ser en terrenos libres, lo suyo era? irnos el d?a antes, sol?amos quedar sobre el medio d?a del s?bado ?y all? en pleno campo, dormit?bamos algo y ?esper?bamos a que saliera el sol para colocarnos en los ya reservados puestos esperando la entrada de las tortolillas.

Pero hoy d?a eso ya es inviable, ya se perdi? del todo,? entre otras cosas porque ya no existen los terrenos libres, y adem?s los cuerpos ya no est?n para pasar toda una noche acostado en el duro suelo del rastrojo.

Hoy en d?a cada cual suele tener su finquita, en la que, si no se hace comedero, seguramente se har? en alguna finca colindante, y nos dar? la oportunidad? de colocarnos al paso para poder disparar sobre alguna torcaz, y qui?n sabe si alguna tortolilla.

Ese es mi caso este a?o, no he querido ?aportar comida a las palomas y t?rtolas, porque el ochenta por ciento del mismo acaba siendo consumido por las reses, tanto venados, como gamos, y ?sobre todo jabal?es.

Es por lo que a sabiendas de que en la finca que linda con una de las m?as, si que se ha hecho un gran comedero, me colocar? en la l?nea de vuelo de las aves, e intentar? bajar alguna que otra, y aunque a m? esto me gusta mucho menos que tirarlas con cimbeles, al estar prohibido aqu? en Extremadura, me tendr? que conformar con tirarlas al paso, como se suele decir es lo que hay.

Para ver por donde pasaban las palomas, este domingo pasado nos acercamos a ver como tradicionalmente se dice a ver el paso, Francis, Segundo y yo.

No es que fuera exagerado el paso, pero hay que reconocer que se ve?an bastantes palomas, en una hora de tiempo m?s o menos, pasar?an ?por esa l?nea de vuelo, unas doscientas palomas, por lo que en principio presumiblemente tirar?amos algunos tiros.

Al ser s?bado, y tener que trabajar por la ma?ana,? Segundo no podr?a? acompa?arnos, por lo que quedamos para ir,? Francis y yo a las seis y cuarto de la ma?ana en la churrer?a de la Mejostilla, donde dejar?amos all? su coche y nos ir?amos con el m?o, pues tambi?n tengo que trabajar, y quiero venirme de vuelta lo antes posible.

Y lleg? el d?a. A las seis de la ma?ana ya estaba esperando a Francis frente a la churrer?a de la mejostilla, que como sab?amos que estaba cerrada por vacaciones tuve la precauci?n de coger de casa un termo con leche caliente, unos dulces, y unos sobres de caf? descafeinado con la intenci?n de desayunar una vez lleg?ramos a la finca.

Sobre las seis y diez lleg? Francis ?metimos su equipo en mi coche y nos fuimos direcci?n Torrej?n el Rubio.

Hasta el kil?metro treinta y nueve todo fue bien pero llegando al kil?metro cuarenta? nos apareci? un enorme jabal? en mitad de la carretera, l?gicamente fren? lo que pude el coche y trat? de esquivarlo casi me salgo por la parte izquierda de dicha carretera, pero consegu? estabilizar el coche y volv? a la parte derecha ?donde estaba parado el jabal?, al momento son? un fuerte golpe y entendimos que hab?amos chocado con ?l, y as? hab?a sido, unos metros m?s adelante paramos el coche y nos bajamos, el jabal? no se ve?a en la carretera, pero pudimos comprobar que en la parte trasera del coche este hab?a producido un buen refreg?n y le hab?a hecho seguramente con uno de sus colmillos un corte al reposapi?s y a la rueda trasera. Dimos marcha atr?s para ver si el jabal? estuviera en la cuneta, pero no se ve?a nada por los alrededores, por lo que con un buen susto encima iniciamos de nuevo el viaje y unos minutos despu?s est?bamos en la finca.

Comentamos los dos de la que nos hab?amos librado, estaba claro que si hubi?ramos chocado de lleno con el enorme jabal?, el coche hubiera recibido un golpe ?tan brutal que lo hubiera destrozado, o lo que es peor que nos hubi?ramos salido de la carretera, lo que seguramente nos hubiera hecho volcar, y encontr?ndonos justamente all? con un buen precipicio la cosa hubiera sido seria.

Una vez en la finca y aun con el susto del cuerpo, desayunamos y despu?s nos dirigimos cada uno a su puesto, Francis se coloc? en el mismo cerro de Cantalobos, y yo me puse en el puesto de los pinos que est? unos doscientos metros debajo del cerro.

Sobre las ocho? comenzaron a venir algunas torcaces pero como no se mov?a ni una sola pizca de viento ven?an bastantes altas, por lo que l?gicamente la mayor?a pasaban sin que las tir?ramos. La mayor?a pasaban a la izquierda de donde estaba colocado Francis, y en menos de media hora pasar?an por all? un par de cientos de torcaces, aunque como digo la mayor?a muy altas.

Tiramos algunos tiros a las que se despistaron, y al final pudimos cobrar entre los dos algunas t?rtolas y palomas, y tambi?n un par de patos. Al fin y al cabo de lo que se trataba era de pasar el rato y comenzar la Media Veda disfrutando con algunos tiros bonitos. Sobre las nueve y media decidimos que nos march?bamos, y despu?s de despedirme de una pareja de pichones de torcaz que estaban en su nido al lado del puesto nos fuimos de vuelta a C?ceres con la idea de parar de nuevo donde el percance y ver si el cochino pudiera estar cerca.

Una vez all?, y comprobando que del cochino nada de nada lleg? la Guardia Civil y levantaron el atestado, ?estos se portaron muy bien y fueron unos aut?nticos profesionales.

 

Debido al corte que tenia la rueda nos aconsej? que fu?ramos despacio y que al llegar a C?ceres la cambi?ramos por la de repuesto, cosa que l?gicamente nada m?s llegar hicimos en el taller de nuestro amigo ?Andr?s.

Por la tarde decidimos que ir?amos de nuevo un rato pues por las tardes las torcaces suelen volar m?s bajas, y adem?s era posible que soplara algo de viento, por lo que a las cinco de la tarde quedamos para tomar caf? y despu?s acercarnos de nuevo al lugar donde hab?amos estado por la ma?ana, pero en este caso ir?amos los tres, Francis, Segundo, y yo.

Estaba claro que no era mi d?a, pues nada m?s salir, en la primera curva fuerte se me encendi? el chivato de estabilizaci?n del coche y adem?s un fuerte ruido, incluso pensamos que hab?amos reventado una rueda, paramos y no, no hab?a ninguna rueda reventada, por lo que iniciamos de nuevo la marcha, pero a los pocos metros nos volvi? a ocurrir, ya eso me preocupo mas por lo que decidimos que no pod?amos hacer cien kil?metros en estas condiciones.

Estuvimos deliberando un rato que hacer, y al final decidimos que ir?amos despacio y ya ver?amos que ocurr?a, y la verdad es que en todo el resto del trayecto no volvi? a ocurrir nada anormal.

Una vez en la finca Francis se coloc? en el puesto del cerro, aunque yo le dije que no lo hiciera pues hacia bastante viento pero no me hizo caso, Segundo se fue a la linde del Cardoso y Jarallana y se coloco en la parte baja.

Hac?a mucho calor, por lo que las palomas hasta la siete de la tarde no hicieron acto de presencia, yo segu?a muy nervioso, primeramente por lo del cochino, y despu?s por lo del coche, lo que se tradujo en que no estaba tranquilo y fall? alguna paloma que otra, a pesar de que las palomas pasaban por varias l?neas lo que me hizo cambiarme dos veces de puesto, cosa que no me gusta, pero que si que hice. A todo esto Francis segu?a sin tirar, le llam? cabez?n varias veces, y al final lo convenc? para que se colocara a mi derecha por donde estaban pasando bastantes palomas. Al final me hizo caso recogi? el puesto y la escopeta y se puso donde yo le dije, y fue nada m?s llegar y comenz? a tirar algunas torcaces, Segundo por su parte no tiraba mucho, pero me coment? por tel?fono que estaba viendo bastantes palomas pero que le estaban toreando, se hab?a cambiado varias veces de puesto y con eso empeoro su resultados.

Cuando comprend? que aquello se hab?a acabado y preocupado como estaba por lo del coche, los llam? y decidimos que nos marchar?amos, ya hab?amos matado el vicio, hab?amos cobrado algunas torcaces y al d?a siguiente yo ten?a tirada de la Sociedad Monte fragoso y ten?a que preparar todo el equipo y madrugar mucho, lo ?nico que ped? antes de acostarme fue que al menos el d?a siguiente no se pareciera a este. Cuando sale un d?a malo es malo hasta el rabo.

 

SEGUNDA SALIDA. 20 de Agosto, (Domingo)

 

No sab?a si al d?a siguiente tirar?an las palomas y t?rtolas en Jarallana, por lo que estuve dudando si ir al Carrascal, donde ten?amos la primera tirada de la temporada, o ir a las Mesas y colocarme en la linde, si las tiraban desde luego har?a m?s que en el Carrascal, pues ya nos hab?a comentado el amigo Pedro, que este a?o estaba flojo, y que alguien nos hab?a quitado los p?jaros que ten?amos, y que seguramente ser?a Jarallana, el caso es que era el primer d?a y al final qued? con Andr?s y Jos? y me fui con ellos, quedando a las 5,15 de la ma?ana frente a la churrer?a de la Mejostilla.

Una vez en la finca sorteamos y me toc? el n?mero ocho, en teor?a no era un puesto bueno, y as? fue, tir? muy poco y solo consegu? cobrar dos palomas y una t?rtola, pero lo que me tenia fascinado, y a la vez cabreado era el tiroteo que ten?an en Jarallana, era espectacular, y as? lo demostraron los resultados, pues una vez que me pude enterar de lo que hab?an hecho, me qued? pasmado al saber que hab?an cobrado 394 t?rtolas y 279 torcaces. L?gicamente me arrepent? de no haber decidido ir a la linde, pero la caza es as?.

Sobre las nueve me quit? y esper? a que vinieran a recogerme, despu?s de charlar con los compa?eros, y saber que hab?amos cobrado, nos fuimos los tres a C?ceres donde nos tomamos dos fr?as cervezas en Los Siete Robles que me supieron a gloria, como sin pena ni gloria hab?a terminado para m? el primer fin de semana de la Media Veda, 2017. Al menos tuve la oportunidad de salir unos ratos al campo y disfrutar del bonito vuelo de las torcaces, y de alguna t?rtola que otra.

Al d?a siguiente me confirmaron que los fuertes ruidos y pitidos del chivato de la tarde antes por dos veces eran debido a que la rueda de repuesto no era igual que las otras tres, lo que hac?a que saltara dicho chivato. Esperemos que el pr?ximo fin de semana sea algo m?s llevadero, y aunque no cobre muchas palomas y t?rtolas, al menos sea un fin de semana tranquilo

Ya os contar?.

 

 

 

 

Cazador, como mi padre

Hasta hace poco no me hab?a parado a pensar por qu? motivo yo soy cazador o me gusta el mundo de la caza. Y es cierto que este deporte se puede considerar bastante sectario, cerrado o privado, como queramos llamarlo, ya que es muy dif?cil entrar en contacto con una afici?n como la caza sin tener a alguien que te gu?e o te ense?e c?mo es este mundo desde dentro.

Me gusta la caza desde que tengo uso de raz?n y creo que hay varios factores que han influido para que esto sea as?, y para que yo, a d?a de hoy, me pueda considerar un cazador. Es un deporte que se practica rodeado de la m?s absoluta naturaleza, algo que desde siempre me ha gustado. Para practicarlo hace falta tranquilidad pero?te proporciona peque?as dosis de adrenalida en momentos puntuales, que lo convierten en?adictivo. Y adem?s es un deporte tradicional que me transmiti? mi padre de una manera tan intensa como a ?l le gustaba.

Mi primer d?a de caza junto a mi padre

Entr? en contacto por primera vez con este mundo a la temprana edad de 5 a?os. Era una tarde de ?verano de 1985 cuando mi padre decidi? que ya era el momento de darme a conocer esta bonita tradici?n, y me llev? de caza por primera vez. Mentir?a si dijera que recuerdo aquella tarde con todo tipo de detalles, pero s? que tengo algunos destellos de aquellos primeros momentos de caza con ?l. ?bamos a cazar t?rtolas en el coto de la finca perteneciente a mi padre, bastante cerca de la casa en la que verane?bamos por aquel entonces. Evidentemente yo iba de ?perro? con ?l, para cobrar las piezas que abatiera, pero a?n as? me llev? mi escopeta de fulminantes (petardos) que me hab?a comprado mi padre en Alicante ese mismo verano. No hab?a mejor ocasi?n que esa para usar mi escopeta, aunque ?sta fuera de juguete.

Recuerdo la ilusi?n que me hac?a compartir ese momento a solas con mi padre y lo importante que me sent?a por poder ir con ?l a un sitio, que para mi era tan lejano a esa edad (a 2 km de casa) y hacer algo que nunca hab?a visto. Recuerdo el atronador estruendo del primer disparo y el leve pitido que me dej? en los o?dos? pero no me importaba porque estaba con mi padre. Recuerdo el olor por primera vez de la p?lvora, el humo saliendo del ca??n de su vieja escopeta y el desplome de la t?rtola que con su esquivo vuelo intentaba atravesar el regato en el que nos hab?amos situado. Recuerdo las palabras de mi padre mientras cargaba la escopeta: ?Ala macho!! Corre a por ella!!?, mi dubitativo correr hacia donde yo cre?a que hab?a ca?do la t?rtola y el miedo que me daba no saber c?mo coger aquel animal del suelo? intentando cogerla por la punta de un ala para no tocarla demasiado, como si aquella t?rtola me fuera a transmitir alguna enfermedad.

Con mi primera escopeta a la edad de 14 a?os junto a mi padre

Desde aquel d?a nunca falt? a ninguna de las citas cineg?ticas que tuvimos, en especial en la ?poca estival, que era cuando ?l sol?a cazar. Con el pasar de los a?os me fui dando cuenta que ?l era un gran cazador, en especial cuando compar?bamos las perchas al final de la jornada con las de otros cazadores (generalmente mis t?os y primos) y casi siempre era mi padre el que ten?a la mayor cantidad y con bastante diferencia, y yo me sent?a part?cipe de ese ?xito porque las hab?a cobrado todas.

Por mi comuni?n mis t?os me regalaron mi primera escopeta de perdigones, y yo ya era el ni?o m?s feliz del mundo pudiendo practicar el tiro con inocentes pardales y herrerillos, imitando a mi padre en las cacer?as de t?rtolas que ten?amos a finales de verano.

Con 14 a?os me regal? una escopeta del calibre 20, con la que ya s? que me sent?a todo un hombre pudiendo disparar sobre las aves en pleno vuelo, tal y como le hab?a visto hacer a ?l?durante los ?ltimos 9 a?os. Recuerdo que me hac?a mucha ilusi?n poder cazar con mi propia escopeta, pero el primer d?a que fuimos de caza me d? cuenta de que por primera vez yo cazar?a s?lo, pero mi padre tambi?n, porque nos pondr?amos en puestos separados, y eso me hac?a sentirme un poco triste despu?s de compartir tantos momentos con ?l. Yo creo que ?l tambi?n ten?a ese ligero sentimiento, pero tambi?n pod?a leer en sus ojos y en su ligera sonrisa, el orgullo que sent?a de que su hijo siguiera sus pasos.

Con 18 a?os junto a mi padre en la apertura de la media veda

Nunca llegamos a hablar de aquello, pero yo creo que el sentimiento era rec?proco y cada uno echaba de menos la compa??a del otro en esas jornadas de caza. Y supongo que para suplir un poco ese vac?o, siempre nos pon?amos en puestos bastante pr?ximos, de tal forma que tuvi?ramos un contacto visual, as?, aunque no est?bamos juntos y no pod?amos hablar, siempre cada uno ve?a los lances del otro, le avisaba de alguna pieza que se le acercaba o le jaleaba cuando abat?a alguna t?rtola de manera espectacular.

Muchos son los recuerdos que me quedan de todas aquellas jornadas de caza vividas junto a mi padre. Bonitos e imborrable momentos que me dej? como legado de su generosidad y su constante buen humor. Por todos esos momento me siento el hombre m?s afortunado del mundo, y ahora que mi padre ya no est?, valoro todav?a m?s cada rato de felicidad que pas? a su lado. Sirvan desde aqu? estas l?neas como homenaje para el hombre que no s?lo me ense?? a ser un buen cazador sino la persona, el marido y padre en que me he convertido gracias a los valores que ?l me transmiti?.

Gracias Pap?!

Orejeras Electr?nicas para la Caza

OREJERAS ELECTR?NICAS PELTOR 3M SPORT TAC

Buenos d?as a todos los aficionados a la caza de las palomas torcaces, y en particular a los cimbeleros.

Hoy os hablar? de algo que hace muy poco tiempo a m?, ?as? como a ?un gran n?mero de aficionados a la caza no se le hab?a pasado por la cabeza, de hecho lo ve?amos como algo bastante incomodo y que en ning?n caso ten?amos intenci?n de que formara parte de nuestro equipo de caza, y sobre todo de utilizarlo en todas nuestras salidas cimbeleras.

Me estoy refiriendo a las orejeras electr?nicas, no a las orejeras cl?sicas que sol?amos utilizar para el tiro deportivo, y el tiro al plato, aquellas orejeras que aun hoy se siguen utilizando aunque l?gicamente menos, y que nos aislaban totalmente del medio ambiente.

Orejeras electr?nicas 3M

Me referir? en estas l?neas a este tipo de orejeras electr?nicas que llevan poco tiempo en el mercado pero que cada vez se ven m?s, y m?s, siendo utilizadas por muchos ?aficionados a la caza en general, tanto mayor, como menor.

El tema por lo que los aficionados en general a la caza, incluyendo a un servidor ?ramos reacios a utilizar orejeras para practicarla, es porque l?gicamente, y como acabo de decir te aislaba del ambiente que nos rodea, en una palabra que no o?as nada, y l?gicamente es algo que el cazador no acepta de ninguna de las maneras. Pero con este nuevo tipo de orejeras electr?nicas, ese problema deja de serlo, pues bloquean el ruido de los disparos, y aumentan los sonidos del entorno, lo que se traduce en que parece que no tienes nada puesto, y si que tienes un verdadero aislamiento que no te impide para nada el desarrollo de ?la acci?n de caza.

 

Detalle de las orejeras electr?nicas

Cuando comenc? a tener cierto inter?s por este tipo de orejeras me encontr? con otro hipot?tico tipo de problema, que era que me pudiera molestar al encararme la escopeta, pero NO, ?para nada, simplemente opt? por echarlas un poco hacia atr?s al coloc?rmelas , y ya no hab?a molestias de ning?n tipo.

Despu?s de todas estas dudas ya casi aclaradas, decid? adquirir unas, y parte de la temporada pasada la utilice en todas mis salidas cimbeleras, que entre otras cosas ?no fueron pocas, y sinceramente, y como se suele decir me he enganchado a ellas, es una verdadera maravilla el tenerlas puestas, o?r perfectamente el medio ambiente, y no recibir para nada el fuerte y molesto ruido de los disparos.

Comentar tambi?n que dichas orejeras vienen con dos juegos de tapas, uno verde, y el otro de color anaranjado, para que se nos vea bien de lejos, pero como no pod?a ser de otra manera, yo los naranjas los he pintado de un color camuflado para intentar que se mimeticen lo mas posible dentro de nuestro puesto palomero.

 

Orejeras electr?nicas camufladas

Yo desde estas l?neas os animo a que las prob?is, si os ocurre igualmente lo que a un servidor, quedareis encantado de sus servicios. Y ?otra cosa, en esas ma?anas tan fr?as que solemos pasar en el interior de nuestro puesto os vendr? Dios a ver, ya lo ver?is.

Yo hablo de un modelo en particular, pues no he probado otros, del (PELTOR 3M SPORT TAC) no tengo inter?s en hablar de uno u otro, simplemente que este modelo, como digo lo he utilizado en acci?n de caza, y es una verdadera gozada, en una palabra, estoy encantado con ?l, animaros, me lo agradecer?is.

 

FICHA T?CNICA

Las orejeras electr?nicas para caza 3M Peltor Sport Tac son un protector auditivo activo inteligente creado especialmente para todos los cazadores y tiradores. El sistema electr?nico protege el o?do de los ruidos da?inos como los disparos de un arma de fuego, al mismo tiempo que no te a?sla y te permite escuchar mejor los leves sonidos del entorno, como las pisadas de un animal o los perros de caza al acercarse. Muy c?modas de llevar y no impiden apuntar el arma.

Protectores auditivos electr?nicos e inteligentes: bloquean el ruido de los disparos y aumentan los sonidos del entorno.

Equipadas con funci?n de apagado autom?tico: evita gastar energ?a cuando no las est?s usando.

Diadema plegable para almacenarlas f?cilmente durante las jornadas de caza.

Entrada de audio para conectar una radio externa o tel?fono m?vil (compatible con m?ltiples conectores, se venden por separado).

Caracter?sticas t?cnicas:

Conectividad: Conector J22 (adaptadores disponibles, no incluidos).

Tiempo de funcionamiento: 600 horas aproximadamente.

Bater?as: Pilas 2 x AAA.

Contenido de la caja:

Orejeras electr?nicas 3M Peltor Sport Tac con conchas principales, 2 x conchas suplementarias, Pilas 2 x AAA, Manual de Instrucciones.

CARACTER?STICAS

Tipo de producto:?Protecciones

Dimensiones:?21,6 x 11,9 x 10,6 cm

Peso:?318 gr

 

Juan Manuel Alonso Rabazo.-

Lamentos de un Palomero

Hemos recibido un escrito personalizado de un aficionado palomero Andaluz, en el que solicitaba de nosotros a ser posible que hici?ramos p?blicas sus peticiones, y las de muchos cientos de cazadores Andaluces, que ven como a?o tras a?o se est? deteriorando la querencia de las palomas torcaces en las mejores zonas palomeras de la comunidad Andaluza, debido a la presi?n que estas aves est?n sufriendo al estar permitido el poder cazarlas todos los d?as de la semana. En pocas palabras este aficionado palomero solicita de la Administraci?n Competente que se tenga en cuenta su solicitud , y la de cientos de aficionados Andaluces a esta Modalidad de caza.

LAMENTOS? DE? UN? CIMBELERO

Hola a todos, mi nombre es ?Manuel, soy de Sevilla, y tambi?n un humilde cazador de 60 a?os, ?que mi ?nica afici?n es la Caza de la Paloma Torcaz con Cimbeles, la cual practico desde la infancia junto a mi pobre, y desaparecido padre, hasta sus? ?ltimos d?as.

Quer?a dejar en estas l?neas constancia de lo que est? ocurriendo en mi querida Andaluc?a, y personalmente creo que es algo inaudito.

En las ?ltimas temporadas Cineg?ticas multitud de aficionados? Andaluces ?a esta preciosa modalidad de caza, han comprobado que durante la temporada de Media Veda, se est?n haciendo infinidad de comederos (cebaderos) destinados a atraer a base de grandes cantidades de diferentes tipos de granos a las torcaces aut?ctonas de las diferentes zonas de dicha Comunidad Aut?noma.

En dichos comederos (cebaderos) durante dicha media veda se realizan aut?nticas masacres, de principalmente pichones del a?o, de palomas torcaces, que entre otras cosas van directamente a la basura pues se estropean debido al fuerte calor reinante en ese periodo cineg?tico.

Estos comederos Cebaderos se siguen manteniendo una vez terminada la? temporada de media veda, para posteriormente en oto?o? volver a repetir dichas masacres.

Cientos de cazadores como el que suscribe est? indignado al comprobar que en esta Comunidad se puede cazar todos los d?as? a la paloma torcaz, dichos cazadores de lo que m?s nos quejamos es de que no se deja? descansar a la torcaz, pues l?gicamente al estar autorizado siempre, y todos los d?as hay cazadores? tir?ndolas, impidiendo con ello que las aves lleguen a aquerenciarse en dichas zonas.

Desde estas l?neas un servidor, y cientos de cazadores amantes de esta bonita modalidad de caza, solicitamos de la Administraci?n que se haga cargo de lo solicitado y esperando que no sea ya demasiado ?tarde, tome nota y haga algo al respecto, esperando que a poder ser se corrija en esta campa?a 2017-18 y se haga constar en la Orden General de Vedas.

Firmado,?? Un verdadero aficionado

Manuel.

Seguro que eres observador??

De todos es conocido que el palomero, y sobre todo el cimbelero suele ser una persona muy observadora, una persona que est? atenta a todo lo que le rodea, cuando permanece en acci?n de caza, y cuando no, vamos ?que est? en todas.

Yo estoy de acuerdo con ello, pero desde estas lineas os reto a que me dig?is la similitud que existe entre las siguientes fotograf?as que os pongo a continuaci?n.

El tema es el mas normal del mundo, simplemente una jornada de adiestramiento de pichones para palomas con caperuzas o ciegos, pero como os dec?a existen entre ellas cierta similitud, bueno mas que cierta, yo dir?a que mucha similitud.

Demostrarme que si ?sois unos ?aficionados muy puestos en el tema, ?y decirme cual es esa similitud entre las fotograf?as.

Espero que no tard?is en responderme con un comentario la que creeis que puede ser la respuesta correcta, si os fij?is bien es muy sencilla.

Juan Manuel Alonso Rabazo.