3? Concurso de Cimbeles de Bomba en Feciex

El pr?ximo 16 de Septiembre de 2017 con motivo de la celebraci?n de 2017, tendr? lugar en el recinto ferial IFEBA, de

Badajoz la celebraci?n del 3? Concurso Internacional de Cimbeles para la Caza de la Paloma torcaz.

Se ver?n en Badajoz los mejores Cimbeleros de Espa?a y Portugal, ofreciendo los espectaculares vuelos de sus palomos sobre sus cimbeleras.

Este a?o habr? premios con placa institucional y diploma para los tres mejores cimbeleros y regalos de casas comerciales colaboradoras, para el resto de los clasificados. Ademas todos los concursantes tendr?n de regalo una entrada para entrar gratuitamente al recinto Ferial para disfrutar de la feria.

ABIERTO EL PLAZO DE INSCRIPCI?N

Para inscribirse mandar un email a asociacionjuvenex@yahoo.es, o en el tel?fono 661449091 (Alberto Covars?)

 

Ultimas salidas de Media Veda 2017

ULTIMAS SALIDAS DE MEDIA VEDA 2017

 

Bueno, pues se acab? lo que se daba, por este a?o ya podemos limpiar y engrasar las armas, y recoger en nuestros trasteros los puestos y dem?s componentes de nuestro equipo ?tortolero.

Se daba la coincidencia que este a?o el d?a de Extremadura ca?a en viernes, por lo que en principio tendr?amos tres d?as por delante para salir al campo en busca de las tan deseadas tortolillas, y algunas torcaces autoctonas.

Eso en principio, por que ya metidos en faena era l?gico que no sali?ramos ma?ana y tarde durante los tres d?as, entre otras cosas es por que el que mas y el que menos tiene familia, y ademas la temporada de Media Veda de este a?o no se va a recordar por la abundancia de t?rtolas y torcaces en nuestros campos.

Yo personalmente sal? al campo el viernes por la ma?ana, el s?bado por la tarde y el domingo tambi?n por la ma?ana. Aprovech? para llevarme a mi nuevo perro e intentar educarlo a estar conmigo de quieto en el puesto y cobrar los p?jaros abatidos.

Me lo llev? el s?bado por la tarde, y a la primera torcaz que abat?, al cobrarla y llenarsele toda la boca de plumas, la trasladaba de un sitio para otro, y si se descuida me la pela del todo, pero poco a poco fue cogiendo afici?n, y al final de la tarde era todo un espect?culo ver cobrar, y llegar a las torcaces casi antes de haber ca?do al suelo, la pena es que aunque si que vi bastantes palomas no cobr? muchas, tampoco fueron pocas pero me hubiera gustado matar ?al perro una docena mas de p?jaros. Que afici?n cogi?, era digno verlo a mi lado sentado y mir?ndome a ver si me encaraba la escopeta, la verdad es que disfrut? como hacia tiempo, y por eso decid? que el domingo por la ma?ana repetir?a salida para ver si el perro se aficionaba del todo. Y as? fue. Tambi?n en esta ocasi?n ?le mat? unas palomas, y este se port? como un verdadero campe?n. Este a?o tengo intenci?n de llev?rmelo muchos d?as de caza al puesto, ya veremos como me apa?o para manejar perro y cimbeles a la vez, ya veremos, pero lo que est? claro es que lo voy a intentar, un perro de este tipo da mucha compa??a en el campo, y ya hacia a?os que no compart?a puesto y perros, debido a que en los ?ltimos a?os solo hab?a tenido podencos, y estos como todos sabemos suelen ser algo mas recios para mantenerlos quietos en posici?n de espera y cobro en el puesto.

El caso es que sal? tres ratos del (fin de semana puente), los dem?s ratos los dediqu? a seguir adiestrando a los pichones de este a?o a los cimbeles , y de paso a repintar los altillos que suelo utilizar para colocar en el interior de los puestos naturales y que me den mas altura que tengo en mis cotos, y tambi?n ?algunas p?rtigas de las que utilizo para el aprendizaje de dichos cimbeles, me gusta pintarlos todos los a?os, pues de tanto uso llegan a deteriorarse en algunos tramos.

Compart? la pintura con muchos toques de cuerda a los pichones durante toda la ma?ana, el caso es que el s?bado ma?ana los tuve colocados en lo alto de las encinas desde las siete de la ma?ana hasta las dos de la tarde en que los retir?, y despu?s de tomarme junto a mi mujer un aperitivo con una cerveza me duch? y com?, me acost? un ratito a siesta y despu?s me fui a buscar el perro y me fui al campo.

Respecto a la Media Veda de este a?o hay que rese?ar que ha sido flojita,pero es lo que hay, y espero que sigamos saliendo por muchos a?os mas , aunque solo sea por pasar un par de horas en nuestras dehesas contemplando esos bonitos amaneceres , o puestas de sol si es que lo hacemos por la tarde. Dios nos de salud para poder seguir haci?ndolo, ya solo hay que pensar que la apertura de la temporada de caza ya esta a un paso, y esperar que esta ?nos depare muchos momentos de satisfacci?n personal.

Ya hablaremos de eso,seguramente antes de lo que pod?is pensar, tener en cuenta ?que un mes pasa r?pidamente, y despu?s ya estaremos enfrascado en lo que mas nos gusta, CAZAR.

Tercera Salida de Media veda 2017

 

TERCERA SALIDA DE MEDIA VEDA 2017

 

En esta ocasi?n la segunda salida de Media Veda de esta temporada seria en Salamanca, mi buen amigo , y compa?ero de caza Jose Luis, me hab?a invitado a pasar ?el fin de semana ?cazando en la finca de su propiedad.

Seg?n el, no es que fuera para tirar cohetes pero se ve?an bastantes africanas, y tambi?n algunas torcaces entrar a comer ?en el rastrojo de trigo. Ni que decir tiene que a mi autom?ticamente, y como me suele ocurrir en estos casos se me pusieron los nervios nerviosos.

Lo primero que hice fue llamar al hotel donde suelo quedarme para reservar habitaci?n para el fin de semana. Tenia todo organizado para salir el viernes por la tarde al dejar de trabajar para dormir en Salamanca y quedar el s?bado sobre las seis treinta de la ma?ana con Jose Luis para desayunar en la finca, y a continuaci?n irnos al rastrojo, y en principio hacer la tirada de ma?ana.

Pero hay ocasiones en que por muchos planes que hagas surge un problema y te los tira todos por tierra, en este caso ?por un asunto personal tuve que desistir de salir el viernes por la tarde, y centrarme en poder hacerlo si acaso el s?bado a partir de las dos de la tarde, y poder cazar la tarde del s?bado, y el domingo.

Y as? lo hice,como?yo ya sabia ?el mi?rcoles por la tarde que no podr?a salir el viernes , me tranquilic? un poco y me prepar? para hacerlo el s?bado a medio d?a.

Para no olvidar nada en la salida, hice una nota en la cual apunt? todo lo que necesitar?a para ese fin de semana, y poco a poco fui metiendo en el coche el equipo para no dejar nada olvidado.

El s?bado a las seis treinta de la ma?ana me levant?, y despu?s de barrer la piscina fui colocando el resto del equipo en el coche, excepto la comida que llevar?a, y l?gicamente ?las palomas. Despu?s de ir con mi mujer a desayunar ?chocolate con churros a una churreria de Caceres nos fuimos a trabajar.Yo cur?ndome en salud ya hab?a dejado pr?cticamente todo preparado para ?salir para Salamanca lo antes posible.

Sobre las diez y media de la ma?ana llam? a Jose Luis para preguntarle que hab?a hecho, el me dijo que hab?a visto bastantes t?rtolas, y tambi?n algunos bandos de torcaces entrar al rastrojo, y que al final hab?a cobrado 14 africanas, y dos torcaces, me coment? que hab?a visto mas t?rtolas que torcaces, y que en la zona que yo me habr?a puesto si hubiera ido, hubiera cobrado al menos una docena de Palomas, me gust? mucho que se hubiera divertido, pero sent? el no haber podido estar all? con el desde por la ma?ana, pero bueno es lo que hab?a y no pod?a ser de otra manera. Qued? con el en que intentar?a estar a las cinco de la tarde en la finca para que me diera tiempo a montar y cazar por la tarde, le ped? que viera el sitio exacto donde me colocar?a, y que si le daba tiempo me hiciera las gu?as en las encinas donde colocar?a las p?rtigas y a los cimbeles, Jose Luis me dijo que contara con ello y nos despedimos hasta por la tarde. ?Estuve trabajando hasta las dos de la tarde, y ?quince minutos despu?s ya estaba metiendo las palomas en el jaulon de trasporte, ?la comida en el coche y ?dispuesto para salir. A las dos treinta horas tomaba la entrada de la autov?a hacia Salamanca y a las cuatro treinta entraba por la puerta de la finca.

All? en la puerta del porche me estaba esperando Jose Luis, junto a sus dos bonitas mujeres, la suya, y su preciosa hija.

Despu?s de los oportunos y tan esperados abrazos, besos y dem?s , nos despedimos de las dos y nos fuimos directamente al rastrojo. La tarde al contrario que la ma?ana seg?n Jose Luis era calurosa, pero aun as? yo al menos estaba impaciente por montar el puesto cimbelero.

Jose Luis lo tiene mucho mas f?cil, pues el a?o pasado ide? y fabric? un remolque puesto en el cual lleva todo el equipo, incluso los volantines en amplias jaulas, y que hab?a dejado all? a la sombra por la ma?ana. Una vez llegamos a dicho puesto remolque Jose Luis me indico donde me hab?a preparado las gu?as y donde me aconsej? que me colocara, y cinco minutos despu?s ya estaba abriendo y colocando el puesto. Una vez vestida con una malla de verano la estructura del puesto, cosa que tard? en hacer menos de un minuto, aprovech? las ramas que hab?a cortado Jose Luis para hacer las gu?as para pon?rselas alrededor del puesto y as? mimetizarlo un poco mas.

Viendo de donde venia el aire, e intentado estar a la sombra al menos un par de horas, coloque una p?rtiga con un ?vertical en el cual coloqu? a un pich?n del mes de Junio en lo alto, llev? la cuerda hasta el puesto y a consecuencia de que el aire no venia del todo como yo hubiera deseado coloqu? igualmente a su hermano en otro vertical y en una gran encina que me daba la sombra, este estar?a a medio aire, pero lo suficiente para que llamara la atenci?n a palomas que me llegaran de atr?s. Y para rematar la faena, coloqu? la vara Portuguesa en el poste trasero del puesto y sub? en ella a otro pich?n de hace tres meses, una vez que recog? el equipo sobrante y lo coloqu? en la sombra tom? un buen trago de agua y me sent? a esperar acontecimientos.

Yo pens? que al haber estado Jose Luis cazando en el rastrojo y no haber dejado comer a las palomas estas entrar?an antes, pero me equivoqu?, seguramente habr?an comido en otra zona del mismo, y de momento siendo las cinco cuarenta y cinco de la tarde solamente hab?a visto volar de largo una paloma torcaz.

Sobre las seis de la tarde vi venir a mi derecha una pareja de t?rtolas, me pareci? correcto el intentar reclamarlas con los cimbeles y as? lo hice, ?por que no iba a poder probar si se picar?an?

Y vamos si se se picaron, estas se vinieron rectas al cimbel que tenia delante del puesto dispuestas a posarse con el, pero no se lo permit?, me fui con la primera, y la quede seca, me fui con la otra y tambi?n tuve la fortuna de abatirla, hab?a empezado la tarde haciendo un bonito doblete de Africanas nacidas en extremadura, pues se trataba de una pareja de pichones.

A los diez minutos vi venir otra pero a esta no me dio tiempo a reclamarla, sencillamente me fui con ella y la abat?, esta tambi?n era un pich?n.

Las torcaces tardaron en hacer acto de presencia, tardaron al menos una hora mas para moverse por el rastrojo, pero una vez que lo hicieron estuvieron movi?ndose durante toda la tarde, en la cual me dio tiempo abatir ocho bonitas torcaces todas ellas picadas a los cimbeles.

Pr?cticamente fueron todos unos lances preciosos, me entraron a los cimbeles muy bien, y me hicieron disfrutar por dos cosas, la primera es por que los pichones se estaban portando muy bien, y segunda porque me sent? lleno al estar cazando en un rastrojo de trigo, nada de comedero, era un tradicional rastrojo de trigo puro y duro.

Mientras tanto Jose Luis tambi?n tiraba de vez en cuando, posiblemente mas que yo. ?Cuando comprend? que la cosa hab?a llegado a su fin baj? los cimbeles ?de sus posaderos y los met? en el jaulon para que comieran y bebieran.

Mientras tanto quit? el puesto de donde estaba y lo coloqu? en la parte contraria de la encina que me daba la sombra, pues tenia intenci?n de cazar al d?a siguiente en el mismo sitio, pero sabiendo que el viento vendr?a de diferente frente lo coloqu? mirando al sureste.

Cuando recog? lo que no deb?a dejar en el rastrojo y lo met? en el coche me cerqu? a ver a Jose Luis para interesarme por lo que hab?a hecho. Me coment? que hab?a cobrado cuatro t?rtolas y cinco torcaces, y que pod?a haber cobrado algunas mas pero que no pudo ser.

Al momento llegamos a la casa y colocamos las palomas y t?rtolas cobradas en un frigor?fico que Jose Luis tiene all? para estos menesteres, nos lavamos un poquito, y nos sentamos los tres a deleitar una maravillosa cena que nos hab?a preparado la mujer de mi amigo Jose Luis.

Durante la cena estuvimos charlando de diferentes temas muy amenos, y sobre las diez y media me desped? de ellos quedando para el d?a siguiente a las seis cuarenta y cinco en la casa para ponernos de nuevo en el rastrojo.

Una vez que llegu? al hotel, y despu?s de darme una ducha, baj? a la cafeter?a y me tom? un refresco de lim?n, pero mas que nada para pedir una botella de agua y sub?rmela a la habitaci?n por si las anchoas que hab?a tomado durante la ?cena les daba por hacer de las suyas.Sobre las doce de la noche me met? en la cama, y di por concluida la primera jornada de tarde en Salamanca.

A las cinco treinta de la ma?ana y antes de que sonara el despertador me levant?, y despu?s de pasar por la ducha y afeitarme me vest? ?recog? la ropa y la bolsa de viaje, mi almohada y las escopetas, y media hora mas tarde ya estaba en camino hacia la finca, fui muy despacio pues me sobraba tiempo, y ,media hora mas tarde estaba en la puerta del palomar de Jose Luis que es donde estaba este recogiendo los cimbeles.

De all? nos fuimos al rastrojo, y cuando llegamos al puesto remolque nos despedimos, Jose Luis se iba a cambiar a otra zona ?del mismo, y yo al mismo sitio de la tarde antes.

Unos minutos despu?s y con la linterna de cabeza encendida coloqu? los dos pichones en sus respectivas cimbeleras verticales, y al otro en la vara Portuguesa, unos minutos despu?s llev? al coche a la sombra de una gran encina como a unos trescientos metros ?y me volv? al puesto.

Yo estaba convencido de que la jornada en cuesti?n iba a ser de poco movimiento pues se les hab?a molestado por la ma?ana del s?bado, las molestamos tambi?n por la tarde, y lo mas normal es que estas estuvieran mosqueadas y optaran por buscarse otro rastrojo. Sin embargo esa era la ?esperanza que yo tenia, que las tiraran en los diferentes rastrojos de los alrededores y se movieran.

Al rato de amanecer vi pasar cerca de mi cinco t?rtolas a una velocidad incre?ble, al rato otras cuatro, y despu?s tres mas, pero ninguna paloma torcaz. No fue hasta pasada una hora desde que amaneciera cuando la primera torcaz cruz? a doscientos metros de mi puesto y que despu?s de haberla trabajado con los cimbeles se vino picada entrando en la plaza a huevo, no le di oportunidad y me qued? con ella, quince minutos despu?s otra torcaz que venia de la parte de donde estaba Jose Luis, entr? ciega a los cimbeles y de nuevo me qued? con ella. Estaba viendo algunas torcaces pero pasaban de largo para posiblemente posarse en la linde del rastrojo, pero en la otra finca.

Unos minutos despu?s a seis palomas que ven?an de mi izquierda consegu? meterlas a base de cimbeleo, pero con tan mala suerte que se pararon en una encina que hab?a a cien metros. Estuve unos minutos sin moverme para ver que ocurr?a, incluso mov? de nuevo a los cimbeles y lanc? dos ciegos al aire por ver si alguna se animaba a moverse, pero nada, no se mov?an de las copas de la encina. Fue por lo que decid? dar unas fuertes palmadas y esperar acontecimientos, y as? fue, estas se levantararon al ruido de las palmadas, pero r?pidamente comenc? de nuevo a trabajarlas y estas se picaron de nuevo y se vinieron rectas a los cimbeles, a la primera la par? en el aire veinte metros antes de llegar a mi, y al tiro las dem?s repiaron d?ndome la oportunidad de irme ?con otra que tambi?n ?qued? muerta en el aire. Un bonito doblete, pero hay que reconocer que ?mucho ?mas bonito fue el lance en cuesti?n.

La cosa segu?a muy parada, Jose Luis tiraba de vez en cuando pero la verdad que muy poco.Ya sobre las nueve treinta el cimbel que tenia a mi derecha vol? el solo y ?pens? que pod?a ser una rapaz por lo que cog? la escopeta, (solo para espantarla ) si se acercaba y me coloqu? debajo ?de la encina donde estaba el cimbel, le tir? dos veces seguidas de la cuerda para ver si estaba tranquilo y de pronto vi aparecer una torcaz que se pos? junto a el en lo mas alto de la encina. L?gicamente mi intenci?n fue aprovechar la ocasi?n y tirarla, pero pens? que ?la iba a destrozar por lo que baj? la escopeta, al momento me di cuenta de que le estaba viendo la cabeza, por lo que pens? en apuntarla a dicha cabeza y as? no la estropear?a, y as? lo hice, le apunt? a la cabeza , y la dispar?, esta salio volando con mas salud que tenia antes de posarse y se march?, no la toqu? ni un vago, y fue por que en mi obsesi?n por no destrozarla apunt? fuera de la cabeza esperando que alg?n vago le diera en ella, pero no pudo ser, y esta se march?, de lo cual mientras escribo estas lineas me alegro.

Viendo el panorama, recog? todo el equipo y al momento fui a por el coche y cargu? todo en el, de all? me fui en direcci?n a donde estaba Jose Luis, pero este ya me estaba esperando en el camino. Me hizo mucha gracia verle dentro del coche y con el «remolque puesto» enganchado, daba gusto verlo , daba gusto ver a sus volantines dentro de las jaulas que tiene incorporadas a dicho puesto, y que l?gicamente para estos es su palomar,Tambi?n vi que tenia incorporado un bebedero para las palomas soldado al carro . El carro puesto en cuesti?n es un punto, Jose Luis lo lleva todo dentro, p?rtigas , cimbeleras, rodillos, cartuchos, silla, en una palabra todo, todo, todo. Desde ?all? nos fuimos a la casa, pero antes Jose Luis solt? sus palomas en el palomar para que estas descansaran, comieran y bebieran. Una vez all? ?de nuevo nos ?estaban esperando en el jard?n la mujer de Jose Luis, y su bonita hija.

Ellos ten?an intenci?n de que me quedara a comer, de hecho hab?an sacado carne para hacer una barbacoa, pero despu?s de mucho pensarlo decid? que me marchar?a a casa, pues mi mujer se quedar?a sola a medio d?a, y no me parec?a bien dejarla sola, porque si me hubiera quedado, hubi?ramos cazado por la tarde y me habr?a quedado de nuevo en el hotel hasta las seis de la ma?ana del d?a siguiente que saldr?a hacia Caceres. Por eso pens? que lo mejor era marcharme y as? lo hice, una vez que metimos las palomas y las t?rtolas en la nevera que llevo para tal fin, me desped? de todos, y a las once treinta sal? direcci?n Caceres.

El fin de semana en Salamanca hab?a llegado a su fin, seg?n iba hacia casa estuve pensando en todo lo que hab?a vivido desde que sal? de Caceres el s?bado a las dos y media de la tarde, iba muy contento, no por que hubiera hecho una gran percha, ?eso es lo de menos, si no porque realmente hab?a disfrutado. Me gustan estas salidas de media veda para entre otras cosas probar ?los pichones del a?o, tanto de copa, como ciegos, y la verdad es que se hab?an portado como aut?nticos campeones, pero realmente iba contento, muy contento ,porque cada vez que voy a ver a mi amigo Jose Luis a su finca lo paso muy bien en todos los aspectos, he congeniado muy bien con el. y ya fuera de la afici?n que pueda tener al hablar de torcaces que ?por cierto es mucha, es por que lo considero un buen amigo, y me encanta estar a su lado, espero que sea por muchos a?os.

Ya solo queda un fin de semana de Media Veda, ya os contar? donde me dejare caer, si es que llego a salir, que espero que sea que si.

 

Apertura de la Media Veda 2017

APERTURA DE LA MEDIA VEDA 2017

 

PRIMERA SALIDA.?? 19 de Agosto, (s?bado)

 

Aun recuerdo con nostalgia las aperturas de Media Veda de hace treinta a?os m?s o menos, era todo un acontecimiento en nuestras vidas, por lo menos en la m?a. Con que ilusi?n se esperaba el tan se?alado d?a, no hab?a forma de poder dormir la noche antes, si es que no est?bamos en el campo para coger sitio.

Normalmente despu?s de tener visto un rastrojo ?de trigo el cual era visitado por? t?rtolas, y alguna que otra ?torcaz,? y que normalmente? sol?an ?ser en terrenos libres, lo suyo era? irnos el d?a antes, sol?amos quedar sobre el medio d?a del s?bado ?y all? en pleno campo, dormit?bamos algo y ?esper?bamos a que saliera el sol para colocarnos en los ya reservados puestos esperando la entrada de las tortolillas.

Pero hoy d?a eso ya es inviable, ya se perdi? del todo,? entre otras cosas porque ya no existen los terrenos libres, y adem?s los cuerpos ya no est?n para pasar toda una noche acostado en el duro suelo del rastrojo.

Hoy en d?a cada cual suele tener su finquita, en la que, si no se hace comedero, seguramente se har? en alguna finca colindante, y nos dar? la oportunidad? de colocarnos al paso para poder disparar sobre alguna torcaz, y qui?n sabe si alguna tortolilla.

Ese es mi caso este a?o, no he querido ?aportar comida a las palomas y t?rtolas, porque el ochenta por ciento del mismo acaba siendo consumido por las reses, tanto venados, como gamos, y ?sobre todo jabal?es.

Es por lo que a sabiendas de que en la finca que linda con una de las m?as, si que se ha hecho un gran comedero, me colocar? en la l?nea de vuelo de las aves, e intentar? bajar alguna que otra, y aunque a m? esto me gusta mucho menos que tirarlas con cimbeles, al estar prohibido aqu? en Extremadura, me tendr? que conformar con tirarlas al paso, como se suele decir es lo que hay.

Para ver por donde pasaban las palomas, este domingo pasado nos acercamos a ver como tradicionalmente se dice a ver el paso, Francis, Segundo y yo.

No es que fuera exagerado el paso, pero hay que reconocer que se ve?an bastantes palomas, en una hora de tiempo m?s o menos, pasar?an ?por esa l?nea de vuelo, unas doscientas palomas, por lo que en principio presumiblemente tirar?amos algunos tiros.

Al ser s?bado, y tener que trabajar por la ma?ana,? Segundo no podr?a? acompa?arnos, por lo que quedamos para ir,? Francis y yo a las seis y cuarto de la ma?ana en la churrer?a de la Mejostilla, donde dejar?amos all? su coche y nos ir?amos con el m?o, pues tambi?n tengo que trabajar, y quiero venirme de vuelta lo antes posible.

Y lleg? el d?a. A las seis de la ma?ana ya estaba esperando a Francis frente a la churrer?a de la mejostilla, que como sab?amos que estaba cerrada por vacaciones tuve la precauci?n de coger de casa un termo con leche caliente, unos dulces, y unos sobres de caf? descafeinado con la intenci?n de desayunar una vez lleg?ramos a la finca.

Sobre las seis y diez lleg? Francis ?metimos su equipo en mi coche y nos fuimos direcci?n Torrej?n el Rubio.

Hasta el kil?metro treinta y nueve todo fue bien pero llegando al kil?metro cuarenta? nos apareci? un enorme jabal? en mitad de la carretera, l?gicamente fren? lo que pude el coche y trat? de esquivarlo casi me salgo por la parte izquierda de dicha carretera, pero consegu? estabilizar el coche y volv? a la parte derecha ?donde estaba parado el jabal?, al momento son? un fuerte golpe y entendimos que hab?amos chocado con ?l, y as? hab?a sido, unos metros m?s adelante paramos el coche y nos bajamos, el jabal? no se ve?a en la carretera, pero pudimos comprobar que en la parte trasera del coche este hab?a producido un buen refreg?n y le hab?a hecho seguramente con uno de sus colmillos un corte al reposapi?s y a la rueda trasera. Dimos marcha atr?s para ver si el jabal? estuviera en la cuneta, pero no se ve?a nada por los alrededores, por lo que con un buen susto encima iniciamos de nuevo el viaje y unos minutos despu?s est?bamos en la finca.

Comentamos los dos de la que nos hab?amos librado, estaba claro que si hubi?ramos chocado de lleno con el enorme jabal?, el coche hubiera recibido un golpe ?tan brutal que lo hubiera destrozado, o lo que es peor que nos hubi?ramos salido de la carretera, lo que seguramente nos hubiera hecho volcar, y encontr?ndonos justamente all? con un buen precipicio la cosa hubiera sido seria.

Una vez en la finca y aun con el susto del cuerpo, desayunamos y despu?s nos dirigimos cada uno a su puesto, Francis se coloc? en el mismo cerro de Cantalobos, y yo me puse en el puesto de los pinos que est? unos doscientos metros debajo del cerro.

Sobre las ocho? comenzaron a venir algunas torcaces pero como no se mov?a ni una sola pizca de viento ven?an bastantes altas, por lo que l?gicamente la mayor?a pasaban sin que las tir?ramos. La mayor?a pasaban a la izquierda de donde estaba colocado Francis, y en menos de media hora pasar?an por all? un par de cientos de torcaces, aunque como digo la mayor?a muy altas.

Tiramos algunos tiros a las que se despistaron, y al final pudimos cobrar entre los dos algunas t?rtolas y palomas, y tambi?n un par de patos. Al fin y al cabo de lo que se trataba era de pasar el rato y comenzar la Media Veda disfrutando con algunos tiros bonitos. Sobre las nueve y media decidimos que nos march?bamos, y despu?s de despedirme de una pareja de pichones de torcaz que estaban en su nido al lado del puesto nos fuimos de vuelta a C?ceres con la idea de parar de nuevo donde el percance y ver si el cochino pudiera estar cerca.

Una vez all?, y comprobando que del cochino nada de nada lleg? la Guardia Civil y levantaron el atestado, ?estos se portaron muy bien y fueron unos aut?nticos profesionales.

 

Debido al corte que tenia la rueda nos aconsej? que fu?ramos despacio y que al llegar a C?ceres la cambi?ramos por la de repuesto, cosa que l?gicamente nada m?s llegar hicimos en el taller de nuestro amigo ?Andr?s.

Por la tarde decidimos que ir?amos de nuevo un rato pues por las tardes las torcaces suelen volar m?s bajas, y adem?s era posible que soplara algo de viento, por lo que a las cinco de la tarde quedamos para tomar caf? y despu?s acercarnos de nuevo al lugar donde hab?amos estado por la ma?ana, pero en este caso ir?amos los tres, Francis, Segundo, y yo.

Estaba claro que no era mi d?a, pues nada m?s salir, en la primera curva fuerte se me encendi? el chivato de estabilizaci?n del coche y adem?s un fuerte ruido, incluso pensamos que hab?amos reventado una rueda, paramos y no, no hab?a ninguna rueda reventada, por lo que iniciamos de nuevo la marcha, pero a los pocos metros nos volvi? a ocurrir, ya eso me preocupo mas por lo que decidimos que no pod?amos hacer cien kil?metros en estas condiciones.

Estuvimos deliberando un rato que hacer, y al final decidimos que ir?amos despacio y ya ver?amos que ocurr?a, y la verdad es que en todo el resto del trayecto no volvi? a ocurrir nada anormal.

Una vez en la finca Francis se coloc? en el puesto del cerro, aunque yo le dije que no lo hiciera pues hacia bastante viento pero no me hizo caso, Segundo se fue a la linde del Cardoso y Jarallana y se coloco en la parte baja.

Hac?a mucho calor, por lo que las palomas hasta la siete de la tarde no hicieron acto de presencia, yo segu?a muy nervioso, primeramente por lo del cochino, y despu?s por lo del coche, lo que se tradujo en que no estaba tranquilo y fall? alguna paloma que otra, a pesar de que las palomas pasaban por varias l?neas lo que me hizo cambiarme dos veces de puesto, cosa que no me gusta, pero que si que hice. A todo esto Francis segu?a sin tirar, le llam? cabez?n varias veces, y al final lo convenc? para que se colocara a mi derecha por donde estaban pasando bastantes palomas. Al final me hizo caso recogi? el puesto y la escopeta y se puso donde yo le dije, y fue nada m?s llegar y comenz? a tirar algunas torcaces, Segundo por su parte no tiraba mucho, pero me coment? por tel?fono que estaba viendo bastantes palomas pero que le estaban toreando, se hab?a cambiado varias veces de puesto y con eso empeoro su resultados.

Cuando comprend? que aquello se hab?a acabado y preocupado como estaba por lo del coche, los llam? y decidimos que nos marchar?amos, ya hab?amos matado el vicio, hab?amos cobrado algunas torcaces y al d?a siguiente yo ten?a tirada de la Sociedad Monte fragoso y ten?a que preparar todo el equipo y madrugar mucho, lo ?nico que ped? antes de acostarme fue que al menos el d?a siguiente no se pareciera a este. Cuando sale un d?a malo es malo hasta el rabo.

 

SEGUNDA SALIDA. 20 de Agosto, (Domingo)

 

No sab?a si al d?a siguiente tirar?an las palomas y t?rtolas en Jarallana, por lo que estuve dudando si ir al Carrascal, donde ten?amos la primera tirada de la temporada, o ir a las Mesas y colocarme en la linde, si las tiraban desde luego har?a m?s que en el Carrascal, pues ya nos hab?a comentado el amigo Pedro, que este a?o estaba flojo, y que alguien nos hab?a quitado los p?jaros que ten?amos, y que seguramente ser?a Jarallana, el caso es que era el primer d?a y al final qued? con Andr?s y Jos? y me fui con ellos, quedando a las 5,15 de la ma?ana frente a la churrer?a de la Mejostilla.

Una vez en la finca sorteamos y me toc? el n?mero ocho, en teor?a no era un puesto bueno, y as? fue, tir? muy poco y solo consegu? cobrar dos palomas y una t?rtola, pero lo que me tenia fascinado, y a la vez cabreado era el tiroteo que ten?an en Jarallana, era espectacular, y as? lo demostraron los resultados, pues una vez que me pude enterar de lo que hab?an hecho, me qued? pasmado al saber que hab?an cobrado 394 t?rtolas y 279 torcaces. L?gicamente me arrepent? de no haber decidido ir a la linde, pero la caza es as?.

Sobre las nueve me quit? y esper? a que vinieran a recogerme, despu?s de charlar con los compa?eros, y saber que hab?amos cobrado, nos fuimos los tres a C?ceres donde nos tomamos dos fr?as cervezas en Los Siete Robles que me supieron a gloria, como sin pena ni gloria hab?a terminado para m? el primer fin de semana de la Media Veda, 2017. Al menos tuve la oportunidad de salir unos ratos al campo y disfrutar del bonito vuelo de las torcaces, y de alguna t?rtola que otra.

Al d?a siguiente me confirmaron que los fuertes ruidos y pitidos del chivato de la tarde antes por dos veces eran debido a que la rueda de repuesto no era igual que las otras tres, lo que hac?a que saltara dicho chivato. Esperemos que el pr?ximo fin de semana sea algo m?s llevadero, y aunque no cobre muchas palomas y t?rtolas, al menos sea un fin de semana tranquilo

Ya os contar?.

 

 

 

 

Montaje de Ascensores para nuestros Cimbeles

MONTAJE? DE? ASCENSORES? PARA?? NUESTROS? CIMBELES

 

A mediados del pasado mes de mayo, y en esta misma p?gina hablamos de lo que era b?sicamente un ascensor para subir y colocar nuestros c?mbleles en lo alto de las encinas sin tener que utilizar largas y pesadas p?rtigas, ni verse obligado a ?trepar a lo m?s alto de dichas encinas con el riesgo que ello conlleva.

Hablamos tambi?n de los componentes,? y de la fabricaci?n de dichos ascensores, y aunque fue t?midamente el lector creo que entender?a de que se trataba este invento que nuestros vecinos Franceses utilizan hace tiempo en los bosque donde suelen cazar.

Yo ten?a much?simas ganas de tener entre mis manos un ascensor de este tipo para poder copiarlo y montar varios en una de las fincas en las que cazo habitualmente las torcaces con cimbeles.

Eso de tener amigos hasta en el infierno a veces es una ventaja, y r?pidamente recurr? a mi buen amigo Jos? Luis para que se situara y fabricara alguno, A Jos? Luis solamente hay que tocarle las palmas una vez, y cuando quieres dar algunas mas ya est? metido en el lio hasta el fondo, y a la vez a otro buen amigo que es tambi?n mas enreda que yo, que ya es decir, mi buen amigo Claudio.

Como era de esperar, a los pocos d?as Jos? Luis hab?a preparado alg?n que otro ascensor en los ratos perdidos, y adem?s ya los ten?a montados en las encinas que est?n frente a su casa de la finca. Y pas? lo que ten?a que pasar, que le encant? el funcionamiento de los mismos, y r?pidamente me prepar? un par de ellos para m?, coment?ndome que cuando viniera a verme alg?n fin de semana que tuviera tiempo me los traer?a, y montar?amos alguno en el campo para adiestrar a los pichones del a?o. Por circunstancias Jos? Luis aun no ha podido venir a verme y l?gicamente los ascensores aun no me los ha tra?do, pero aun somos j?venes.

La sorpresa fue que en la pasada quedada cimbelera que se celebr? a ?ltimos de mayo en el Casar de C?ceres, se present? mi amigo Claudio con un ascensor que hizo para m? y me lo regal? .Ni que decir tiene que me hizo mucha ilusi?n, y r?pidamente fui a ver a mi tambi?n amigo Andr?s para ponernos manos a la obra y copiar, y construir varios ascensores para colocarlos en la finca lo antes posible.

Una vez que pedimos los materiales que necesit?bamos para construirlos, Andr?s se puso manos a la obra y preparo seis unidades, que pasaron ?r?pidamente a mis manos para pintarlos.

Ya solo faltaba buscar la fecha para ir a instalarlos a la finca, aunque antes hab?a que ir para ver su emplazamiento, que aunque l?gicamente seria en los alrededores de los puestos naturales que tengo en dicha finca, hab?a que ver ?la rama donde se situar?a la parte de arriba que necesitaba de una ?consistente porque al tensar las alambres que hacen subir dicho ascensor se produce un fuerte tiro y la rama donde se sujete debe ser lo m?s fuerte posible.

Y as? lo hice, fui una primera vez, y no me convenci? para nada la situaci?n de las ramas m?s altas, fui una segunda, y lo vi claro, hab?a que hacer una especie de horca donde se colocar?a la parte de arriba del ascensor y sujetarla a la base de las ramas m?s fuertes.

Le hice a Andr?s un peque?o boceto de lo que quer?a hacer, y r?pidamente y en pocos d?as construy? ?dos para probar como quedaban, y si nos gustaba el resultado har?amos el resto.

Y por fin, y ?ya con todo preparado quedamos el pasado domingo a las siete de la ma?ana, haci?ndolo tambi?n con nuestros amigos Francis, y Segundo.

El d?a antes me pas? por la base de Andr?s para sujetar en la vaca de mi coche una larga escalera para subir a las encinas, y los dos grandes soportes, para no tener que perder tiempo el domingo a la ma?ana.

Despu?s de desayunar en la churrer?a de la Mejostilla los cuatro, emprendimos el viaje a Torrej?n el Rubio, y en media hora ya est?bamos entrando por la puerta principal de la finca.

Una vez en el sitio elegido para colocar el primer ascensor, sacamos del coche todo el material y nos pusimos manos a la obra. Para empezar tuvimos un problema serio, y no era otro que Andr?s se hab?a olvidado en casa la cuerda que sujeta el arn?s a la encina, haciendo muy peligroso el estar trabajando a tan alta altura sin arn?s de seguridad. Yo autom?ticamente les dije a mis compa?eros que suspend?amos y que volver?amos otro d?a, pero Andr?s y Francis no me hicieron caso y decidieron que lo har?an con mucho cuidado, pero que lo har?an, yo me enfad? bastante, porque la verdad es que me daba miedo verlos a los dos trabajar en lo alto de la encina sin seguridad.

Una vez que consiguieron convencerme de que tendr?an mucho cuidado y que no pasar?a nada se liaron con la rama m?s alta donde se sujetar?a la horca, y despu?s de podarla estrat?gicamente la sujetaron por la base con bridas y alambres y la quedaron instalada.

Yo desde abajo cort? las alambres a la medida deseada y las pas? por los orificios del ascensor sujet?ndolas arriba con unos sujeta cables muy fuertes y abajo con unos tensores que poco a poco tensamos quedando la alambre lista para su utilizaci?n, a continuaci?n y despu?s de clavar la base de abajo en la tierra con unos pinchos de hierro de sesenta cent?metros de largos a base de golpes de marra, quedando muy bien sujeto, cerramos los tensores a base de darles vueltas y tensando a tope las alambres.

Una vez que aquello qued? montado le colocamos la cuerda de tiro en la base superior del ascensor, la pasamos por la polea superior y la cortamos a medida, probando el ascensor y comprobando con satisfacci?n que funcionaba a las mil maravillas.

En aquel momento sent? algo especial, posiblemente el d?a que me entregaron mi primera casa no sent? ?tanta alegr?a, pero en ese momento me vi ?realizado y me dio mucha alegr?a comprobar que uno de mis sue?os se hab?a hecho realidad.

Una vez terminada la operaci?n del primer ascensor, nos fuimos al puesto del cerro Canta lobos y all? de nuevo montamos un segundo ascensor quedando incluso mejor que el primero, al menos algo m?s tenso.

 

Sobre la una de la tarde terminamos y decidimos volver a C?ceres y tomarnos una cerveza, o dos si eran chicas, porque sinceramente nos las merec?amos, aunque tuvimos que esperar algo m?s de lo deseado para ello, porque a medio camino Andr?s comprob? que se hab?a dejado su tel?fono m?vil ?en la base de la encina, por lo que tuvimos que volver a recogerlo, pero al final s? que nos tomamos aquellas dos cervezas heladas que tanto nos merec?amos.

Como resumen habr?a que se?alar que pasamos una ma?ana muy agradable en el campo, nos re?mos un mont?n, y dejamos colocados dos ascensores en espera de volver de nuevo y poner el? resto.

Desde estas l?neas os animo al que est? interesado en colocar alg?n ascensor en sus cotos, sinceramente os lo aconsejo. Es barato, se coloca bien, solo hay que tener algo de precauci?n y llevar un arn?s con su correspondiente cuerda de seguridad, y tener una finca donde habitualmente cacemos, os ahorrareis el ?ir cargados de pesadas ?p?rtigas y ganareis en tiempo.

Duro con ellos, me lo agradecer?is cuando comprob?is los resultados.

 

Juan Manuel Alonso Rabazo

Cimbelera de Volantinis

11.- Cimbelera de Volantini.»

Es la cimbelera menos utilizada en nuestro pa?s, ?tiene su origen en Italia, donde su uso si que ?es generalizado. El motivo de que en nuestro pa?s no se suela cazar con este tipo de cimbelera, ?es por la dificultad tan grande que conlleva el adiestramiento de las palomas en esta cimbelera, y tambi?n porque donde mejor funcionan es en suelo abierto como puede ser los rastrojos de ma?z o similar, este tipo de cimbelera en la dehesa no funciona bien del todo pues los volantinis en ocasiones suele despistarse y perderse.

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Consiste en una base de la que salen varios tubos cil?ndricos en horizontal de 60 cm aproximadamente de largo, que servir?n para posar en ellos varias palomas adiestradas para volar libres. Esta base descansa sobre un m?stil que va vertical al suelo.

Esta cimbelera se sit?a en nuestro puesto, y su mecanismo de funcionamiento consiste en tener una varita de palo o fibra, o una simple ca?a para mover las palomas y que salgan a volar libres, den unas vueltas y vuelvan a su posadero de nuevo.

Otra forma que pueden tener estas cimbeleras es con plataformas rectangular de hierro con varios cuadrados huecos, unida a un m?stil vertical.

CONCLUSION

Hemos tratado de explicar la variedad m?s usada de cimbeleras que se pueden utilizar en la pr?ctica de la caza de la paloma torcaz con cimbel en Espa?a, l?gicamente cada cimbelero se decantara por la que m?s le guste o le aporte mejor lance.

Nosotros aconsejamos utilizar varias de ellas en nuestras jornadas de caza, ya que cada una tiene una funci?n distinta y puede hacer que esos d?as que las torcaces no est?n muy por la labor de entrar a nuestro enga?o, tengamos a mano una variedad mayor para conseguir el lance de atraerlas hasta nuestra plaza de tiro.

Juan Manuel Alonso Rabazo

 

 

Cimbelera Doble en V

10.- Cimbelera Balanc?n doble con forma «V».»

Esta tambi?n es una cimbelera originaria de Francia, siendo una de ?la m?s utilizadas en este pa?s. Esta formada por dos varillas muy flexibles de 6 mm y 60 cm de largo, que van arqueadas unidas a un m?stil formando una » V». En el extremo de cada varilla lleva colocada una base donde va la paloma ligada por las pihuelas, y llevan enganchadas una cuerda para tirar desde el puesto principal.
Su mecanismo consiste en tirar de dicha cuerda, y que el arqueo haga balancear la varilla y consiga de esta forma el aleteo de las palomas.

Esta cimbelera ha sido casi siempre utilizada en el suelo, entre los rastrojos de ma?z, pero tambi?n se puede utilizar en las copas de los ?rboles. De hecho yo la utilizo pr?cticamente en todas mis salidas cimbeleras, que no son pocas, y me da un resultado mas que aceptable. Tenemos de pensar que al fin y al cabo son dos palomas aleteando a la vez llamando la atenci?n de las torcaces, el aleteo es parecido al del rodillo, o de la horgadera, y que para centrar a dichas torcaces hacia nuestro puesto es ?nica.

 

Esta cimbelera tiene la ventaja de que el adiestramiento de las palomas que pondremos en sus respectivos posaderos es f?cil, solamente sera imprescindible el mantenerlos unas cuantas jornadas en ellos con una pihuela muy corta y aprender?n pronto.

Resumiendo, yo sinceramente os aconsejo que la utilic?is, y la ?coloqu?is ?en la encina que os suele dar la sombra, y aunque teng?is otro tipo de cimbelera en la misma, como puede ser una Horgadera, o un rodillo, no importa, solamente tendr?is que estar algo mas atento a la hora de manejar las cuerdas pero las torcaces sentir?n una atracci?n importante al ver el llamativo aleteo de nuestros cimbeles.

Juan Manuel Alonso Rabazo.-

Cimbelera Mixta (Vertical y Horgadera)

8.- Cimbelera Mixta.» (Vertical y Horgadera)

Esta es ?una cimbelera que ?realmente tiene muy ?pocos a?os de existencia, y en principio con su origen en Italia. Las primeras comenzaron a fabricarse con dos cuerdas, y dos poleas, y aunque al principio causaron furor, poco a poco se fueron desechando por ser muy engorroso el trabajar con dos cuerdas juntas y dos poleas.

Pero volvemos a lo de siempre, el cimbelero es un ser inquieto que siempre esta investigando, y que en una palabra, no se puede estar quieto.

Yo reconozco que lo soy, y aunque me hice de una cimbelera Mixta de dos cuerdas de tiro, al poco tiempo me cans? de ella por lo mismo que acabo de comentar lineas atr?s.

Sent? mucha atracci?n por la misma pero pens? que si se pudiera hacer una cimbelera Mixta con una sola cuerda de tiro la cosa seria perfecta. Y as? fue, como no pod?a ser de otra forma recurr? a mi buen amigo Claudio que yo creo que es algo mas enreda que yo, y le ped? que hiciera un boceto de como se pod?a fabricar una cimbelera mixta, y este amigo que suele ser muy obediente no hizo un boceto, si no que fabric? una cimbelera mixta que funcionaba mas que bien, yo le di la paliza hasta que por aburrimiento me hizo una y hay que reconocer que es una verdadera obra de arte, con la cual cazo muy a menudo

Claudio se dio ma?a de hacer una cimbelera vertical normal a la cual le fabric? una especie de muelle que hacia que el posadero cayera hacia atr?s si quer?as que funcionara como una horgadera, y lanzaba a la paloma igualmente que lo hacia un vertical si era lo que pretend?amos, solamente con ?darle un fuerte tir?n de la cuerda principal.

Se trataba de llamar a las torcaces en cuesti?n con la cimbelera cl?sica, que aunque al salir disparada hacia arriba trabajaba igual que una vertical normal aunque inclin?ndose hacia atr?s ligeramente, el cimbel se acostumbraba pronto a esta ca?da hacia atr?s, y ?ademas en pocas jornadas.

Y una vez que la torcaz se hab?a picado y rendido a la llamada de nuestro cimbel, d?bamos a dicha cimbelera unos ligeros toques de cuerda que hacia que esta se inclinara hacia atr?s haciendo la funci?n real de una horgadera.

Esto evitaba el tener que montar dos p?rtigas , una con una cimbelera vertical, (o de bomba, y otra con una horgadera para culminar dicho lance. Con la cimbelera mixta ten?amos a mano las dos opciones.

Al igual que en alguna ocasi?n os he comentado que hay componentes de nuestro equipo cimbelero que no merece la pena montarlos, en este caso si que os digo que no lo dud?is, y que os fabriqueis una CIMBELERA MIXTA que os dar? muchas satisfacciones, y que ante todo tendr?is dos cimbeleras en una.

No lo dud?is informaros de su fabricaci?n y haceros de una, me lo agradecer?is.

En cuanto al adiestramiento del cimbel que vamos a cazar en dicha cimbelera sera igual que el de una vertical, posiblemente cueste un poco mas pues al lanzarlo hacia arriba como la base cae hacia atr?s este perder? el equilibrio tambi?n ?hacia atr?s ademas de ser impulsado hacia arriba, pero muy pronto se acostumbrara a ello y trabajara perfectamente.

As? con esto tendremos en una misma cimbelera la funci?n de dos. Tirando de una para atraer a las torcaces que pasan lejos y con la otra para centrarlas en la plaza.
Juan Manuel Alonso Rabazo

Cimbelera de Vaiven

7.- Cimbelera de Vaiv?n.»

Este otro tipo de ?cimbelera doble tiene sus or?genes en Francia, y ?b?sicamente consiste en dos ?rodillos cil?ndricos de 30 cm de largo ?aproximadamente cogidos por una horquilla que va unida a una varilla fina de hierro con un poco de inclinaci?n hacia delante, aunque en algunos casos esto no es necesario.

Cimbelera de Vaiven con dos Rodillos

Se utilizan dos rodillos que se fijaran por su varilla en dos ?rboles a una distancia de entre 5 y 14 metros, comunicados entre s? por una cuerda o cable, por donde se deslizara la paloma a trav?s de una anilla atada a una pihuela de 10/15 cm de cuerda.


Cierto es que los Franceses lo utilizan muy a menudo en sus ?bosques y en lo alto de grandes arboles, reclamando a bandos de torcaces que se mueven por los alrededores.El mecanismo que hace mover esta cimbelera es el mismo utilizado para la cimbelera de rodillo, con la salvedad que la paloma al quedar desequilibrada se desplazar? hasta el otro rodillo, guiada a trav?s de la cuerda, es decir, va y viene de un lado a otro.

Hay que reconocer que es un buen complemento para un equipo cimbelero de nota, pero yo opino que no merece la pena el largo montaje de las dos cimbeleras con su tensada cuerda de uni?n, el subirse a dos altos arboles y sujetarlos en las copas ? de los mismos. En una palabra, vale mas el collar que el galgo, es mucho trabajo, y aunque puede llegar a dar su rendimiento, estoy convencido de que hay otros componentes ?del equipo de un cimbelero que har?an pr?cticamente la misma funci?n de llamada sin ser tan trabajoso.

Y ademas luego est? el tema del adiestramiento de las palomas para utilizarlas en este tipo de cimbeleras, l?gicamente hay que pensar que no es f?cil su adiestramiento, aunque tampoco es que sea muy dif?cil, porque el adiestrarlas cerca del suelo acaban aprendiendo a desplazarse de un rodillo al otro, pero el subir los dos rodillos a lo alto de la encina es otro cantar.

Como os dec?a, en el suelo, o cerca del mismo la paloma ?es mas f?cil de adiestrarla, pero en las encinas si a esta le da por tirarse de vez en cuando es una tarea agotadora tener que ?subir y bajar a dicha encina para colocarla de nuevo.

Sinceramente, yo la tengo, y de hecho he cazado con ella, pero tengo que decir que ?al margen de que se tarda bastante en montar, y ademas ?es que lo ideal seria hacerlo entre dos personas para tensar la cuerda en la que va la paloma de encina a encina,se pierde un tiempo precioso que pod?amos emplear en montar otro componente del equipo. Si quer?is tenerla por el gusto de tenerla me parece muy bien, pero creo que le dar?is poco uso, de todas formas como los cimbeleros estamos algo locos, duro con ella, y ya me contareis.

Juan Manuel Alonso Rabazo.-